Cinco meses y veintiún días han durado los vigilantes. Desde ayer, los hospitales de Llerena y Zafra vuelven a estar como antes del 1 de enero, sin guardias de seguridad, un servicio aplaudido al prevenir agresiones y controlar el acceso. La Consejería de Salud y Política Social entiende que era demasiado gasto (50.000 euros por centro) y ha comunicado a la empresa extremeña Secoex la eliminación del servicio, desarrollado fundamentalmente por dos personas (una en cada sitio), con relevos puntuales, que trabajaban en solo en un turno de 15 a 22 horas.
El servicio fue implantado a modo de prueba, dice la Junta, y ha sido retirado tras comprobar que la relación entre el beneficio del servicio y su coste «no era apropiada».
«Estamos indignados. Es triste que nuestros dirigentes no velen por nuestra seguridad y la de sus usuarios», resume Remedios Rodríguez, enfermera que lleva 23 años en el hospital llerenense de los 30 de vida que tiene el centro. Allí trabajan unos 500 profesionales para ofrecer una atención a una población que supera los 25.000 habitantes. Desde hace tres años, amplió su cartera pública con la puesta en marcha de la Unidad de Psiquiatría.
«El hospital de Llerena nunca tuvo para seguridad. Con el cambio de dirección, se agradeció el esfuerzo de destinar un único vigilante. En cinco meses habíamos ido recuperando el respeto que profesionalmente se estaba perdiendo. Usuarios, familiares y sanitarios estaban protegidos y respaldados por una autoridad con la que se mantenía un clima de cordialidad, confianza y mejora en la atención hospitalaria. Una vida trabajando, persiguiendo sueños, buscando resultados, y cuando al fin llegan nos lo quitan», se queja Rodríguez.
La necesidad del servicio, insiste, estaba más justificada por la Unidad de Psiquiatría. El guardia ha actuado ante agresiones a celadores, médicos e incluso policías locales. «Ahora volveremos a ellas. ¿Por qué Llerena no puede mantener su plantilla de seguridad? ¿Existen hospitales de 1ª y 2ª? ¿No merecemos seguridad?», se pregunta. A partir de ahora, en caso de necesidad, se deberá llamar a la Policía Local o a la Guardia Civil.
«Estamos hartos de escuchar los recortes tan necesarios para mejorar nuestra situación pero hartos de sufrir las acusadas diferencias entre nuestro hospital y el resto de hospitales extremeños. A los pequeños se los comen los grandes en cuanto a reparto de presupuesto», insiste entre lamentos.

http://www.hoy.es/v/20120522/regional/sanidad-suprime-vigilancia-privada-20120522.html