JOSÉ CEJUDO. SEVILLA
Publicado Martes, 13-01-09 a las 07:17
Empresarios y sindicatos han dado su apoyo a la iniciativa impulsada
por la Consejería de Gobernación, adelantada por ABC el pasado domingo,
destinada a reformar el Decreto del Derecho de Admisión en locales de
ocio, donde se incluiría exigir a los porteros de tales
establecimientos una serie de requisitos, como son test de drogas y
psicotécnicos y el certificado de penales.
El cambio en la normativa, según algunos propietarios de estos
negocios, debería estar acompañado de la supresión de la figura del
vigilante de seguridad, perteneciente a compañías privadas, que trabaja
en el interior de las salas de fiesta. Naturalmente, este último
colectivo rechaza la idea. Por otra parte, las empresas de ocio también
están estudiando la posibilidad de que sean mujeres las que se coloquen
a las puertas de los locales haciendo funciones de relaciones públicas.
Potenciar la formación
Alfonso Maceda, presidente de la Asociación de Terrazas, Bares y
Discotecas de Andalucía (Tebadis), declaró ayer a este periódico que
cualquier iniciativa que suponga potenciar la formación específicas de
los porteros para reforzar su categoría profesional «no nos parece mal».
Maceda recordó que el Decreto de Admisión contempla que los locales con
aforos de más de trescientas personas, al margen de los porteros deben
contar con vigilantes de seguridad pertenecientes a empresas
homologadas de carácter privado, un segundo colectivo de trabajadores
que según el representante empresarial debería ser suprimido en
discotecas y similres.
La norma fija que habrá un vigilante en un aforo de 300 a 450 personas;
dos entre 451 y 750 clientes; tres entre 751 y 1.000; cuatro vigilantes
cuando haya más de 1.000, y se incrementará un vigilante más por cada
fracción de 1.000 personas.
Según Alfonso Maceda, los vigilantes «ni nos dan el servicio, ni están
preparados para ejercer la actividad, porque al fin y al cabo esta
clase de oficio se aprende con el tiempo».
En el caso de los porteros destacó que a nadie se le ocurre poner a la
entrada del local a alguien que no haya ejercido antes el oficio. La
experiencia, indicó, se adquiere durante un año, estando en un segundo
plano, y fijándose cómo realiza la función los que reciben a los
clientes.
Por ello, razona Maceda, «si con la profesionalización de los porteros,
que van a tener que cumplir más requisitos, podemos sustituir a los
vigilantes de seguridad, estaríamos encantados». El dirigente
empresarial reivindicó la profesión de portero, y lamentó que uno de
ellos falleciera el pasado fin de semana en Madrid de un balazo.
«También hay que agradecerles su función, no sólo criticarlos», resaltó.
Fin de semana y de noche
Según Maceda, para los locales de ocio los vigilantes de seguridad
suponen un problema, y lo explica: «Las empresas no quieren hacer ese
servicio. Es de noche, en los fines de semana y nos mandan personas que
a lo mejor han estado trabajando últimamente cuidando una obra en un
polígono. Eso —enfatiza— a nosotros no nos sirve. No conocen a nuestro
público, a nuestra clientela, y lo único que nos supone es dinero. Los
vigilantes de seguridad no garantizan que todo funcione perfectamente».
En este sentido, confía en que la Junta de Andalucía atienda su demanda
y que esté predispuesta a estudiarla. si bien admitió que no estará
exenta de dificultades. «Habrá que modificar la normativa y eso
complica las cosas, pero sería el momento», dijo.
La Federación Andaluza de Salas de Fiesta, Bailes y Discotecas también
aplaudió la iniciativa de la consejera Clara Aguilera sobre la
profesionalización de los porteros.
En declaraciones a Europa Press, el portavoz de la citada federación,
Manuel Ruiz, explicó que antes de las fiestas de Navidad, este
organismo mantuvo una reunión en Madrid con la Asociación Nacional de
Porteros con el objetivo de suscribir un convenio marco nacional que
incluiría la realización de cursos para actualizar la labor de estos
profesionales.
Así, demandó que las modificaciones «no se hagan de la noche a la
mañana, sino con tiempo, al igual que la Ley de Espectáculos Públicos
se hizo de forma consensuada».
Además, apuntó que el sector está analizando como posibilidad el hecho
de colocar en la entrada de locales a mujeres «como relaciones
públicas», algo que no supondría una «merma» en la seguridad del
recinto.
A su juicio, es necesario «cambiar el concepto de portero y que lo que
esté en la puerta se convierta en otra cosa, más vinculado con las
relaciones públicas, por lo que pueden ser mujeres y hombres las
personas que puedan estar en la puerta, a modo de recibidores de
clientes, y teniendo claro que la persona que no esté en condiciones no
va a entrar».
Mirar al bolsillo
El sindicato UGT valoró igualmente de forma positiva que los porteros
tengan una mayor formación, se sometan a test psicotécnicos y
certifiquen que carecen de antecedentes penales. Luis Martínez,
presidente de la sección sindical ugetista de una empresa de seguridad,
lo que no comparte es la idea de suprimir a los vigilantes en los
locales de ocio.
«El empresario, como siempre, mira a su bolsillo y sería un error muy
grande», manifestó a este periódico. «El portero debe tener unas
funciones marcadas y el vigilante las suyas, que están recogidas en la
Ley».
Resaltó Martínez que «nosotros estamos para dar seguridad a los
clientes, tenemos una titulación, una preparación, y hemos tenido que
superar las pruebas en la Policía».
Facua, Consumidores en Acción, calificó como «correcto» que desde la
Administración andaluza se pretenda elevar el grado de preparación de
los porteros, aunque consideró que «para nada» se debe suprimir a los
vigilante en en interior de los establecimientos.
Rubén Sánchez, portavoz de Facua, aclaró que «el portero no tiene nada
que ver con la seguridad, deben limitarse a canalizar la entrada de
clientes, aunque hay algunos que realizan funciones que no les compete,
de pseudo-vigilantes».
Un grupo de clientes a las puertas de un local de ocio en la capital hispalense. G. LOBATO
La Facua reclama más controles en el sector del ocioHay que «reforzar los controles» de la Administración en el sector
de los locales del ocio, según el portavoz de Facua, Consumidores en
Acción, Rubén Sánchez. En su opinión, se está vulnerando la normativa
sobre el derecho de admisión por parte de algunos porteros, «que
seleccionan a la clientela en función de la apariencia física, y exigen
el pago de la entrada según el sexo o la estética». Asegura el portavoz
de Facua que en los casos en los que se verifica la infracción, la
medida sancionadora que debería adoptarse es el cierre temporal del
local, en lugar de imponer una multa a los propietarios. Por lo
general, opina Rubén Sánchez, «una gran discoteca se recupera de una
multa en pocas horas».
http://www.abcdesevilla.es/20090113/andalucia-actualidad/locales-apoyan-profesionalizacion-porteros-200901130009.html