http://www.lavanguardia.es/ciudadanos/noticias/20090118/53621311237/empresarios-del-sector-del-ocio-aplauden-la-norma-que-regulara-el-trabajo-de-los-porteros-de-discote.html
Hace tiempo que las miserias de la noche de Madrid circulan por los mentideros. Se habla de luchas de clanes, de venganzas, palizas por deudas de drogas, control de puertas, porteros que trapichean y hacen de matones. Del "crimen organizado", al que alude Granados. "Yo tenía veinte años cuando ya se hablaba del clan de los Miami - dice Fernández-.Y ahora, quince años más tarde, esa banda sigue ahí".
De hecho, el clan de los Miami aparece en el informe que la Jefatura de Policía de Madrid maneja en estos días: uno de sus integrantes, Carlos Monje (36 años), alias el Cuchillos,permanece detenido tras el tiroteo de la madrugada del lunes, ante la discoteca Heaven, junto a la Ópera, cuando hubo persecuciones por las calles del centro de la capital y dos muertos.
Ese episodio ha reabierto la caja de Pandora, algo que Alfredo Pérez Rubalcaba trata de rebajar. El miércoles, de noche, su ministerio lanzaba una estadística para demostrar que la capital española está a la cola en la tasa de homicidios en Europa: según Eurostat, Madrid aparecía como la tercera más segura entre doce capitales (con 1,41 homicidios por cada mil habitantes;
Amsterdam, con 4,43 homicidios, lidera la tabla). "En Madrid hay ajustes de cuentas entre bandas criminales. Pero la policía se está esforzando en su trabajo, y espero que no tardemos en ver los correspondientes resultados", ha dicho el ministro del Interior.
El caso es la punta del iceberg, un peldaño más en el proceso de decadencia de la noche de Madrid. Hace dos meses, el jovenÁlvaroUssía moría apaleado por tres porteros a las puertas del Balcón de Rosales, una discoteca en el parque del Oeste, ahora clausurada de forma indefinida. Aquel asunto tuvo consecuencias inmediatas: mientras el juez encerraba a los tres presuntos homicidas, el Ayuntamiento se apoyaba en el incumplimiento de licencias y ordenanzas para cerrar ocho locales y la Comunidad de Madrid anunciaba la aprobación de un decreto para regular la actividad de los porteros. Medidas en un saco roto, el tiempo iría pasando página: mientras se dispersaba el recuerdo de Ussía, un puñado de locales lograba reabrir y la aplicación del decreto de control de los porteros se retrasaba de forma desesperante. Se avanzaba hacia el olvido. Y el crimen organizado recuperaba su pulso.
"No es la primera vez que ocurre", dice una empresaria de la noche que prefiere permanecer en el anonimato. "Hace seis años, gente de los Miami había entrado con bates de béisbol en la discoteca
Rocky. Y en Friends, cerca de la Puerta de Toledo, hubo dos muertos en otra reyerta". Entonces, como ahora, se había hablado de la decadencia de la noche madrileña. Y, entonces, también como ahora, las administraciones habían anunciado mano dura. Resta por ver en qué se concretarán las medidas.
Por ahora, y de manera acelerada, el Ayuntamiento piensa actuar contra los locales ruidosos. Y Granados ha anunciado que el decreto de control de los porteros entrará en vigor el 5 de abril. La medida afecta a 15.000 profesionales. La policía podrá multar con 5.000 euros, e incluso cerrar, aquellos locales cuyos porteros no estén regularizados: los profesionales deberán conocer la Constitución, ser mayores de edad, carecer de antecedentes penales y ser ciudadanos de la UE o tener los permisos de residencia y trabajo en regla. Les acreditará una tarjeta colgada de la solapa. "No es la panacea - dice Granados-.
Sino un granito de arena".
No todos están conformes. "La Comunidad de Madrid sólo quiere limpiarse la imagen. Las discotecas seguirán reclutando a los porteros en los gimnasios - dice Francisco Lahiguera, portavoz de la Alternativa Sindical de Seguridad Privada-.¿Alguien se cree que los 15.000 porteros pasarán el cursillo? Si se quiere seguridad, hay que recurrir a la seguridad privada". Rafael de Castro, presidente de la asociación de porteros de discoteca, ha pedido a la Comunidad que prorrogue la aplicación del decreto por dos años. "Si no, no habrá tiempo para preparar a todos los porteros".
"Estoy de acuerdo con el decreto - dice Elvisrythmics-.Los porteros deben ser educados con los clientes. Tienen mucha responsabilidad en la marcha de un local". "El decreto no me parece mal - dice Pepe Fernández-.Pero me preocupa el efecto dominó. Si la psicosis entra en el ayuntamiento, desaparecerá esa ligera permisividad que nos ha permitido ir desenvolviéndonos. Sin ella, algunos locales se van a asfixiar".