Lleida, 29 ene (EFE).- Un centenar de personas, entre trabajadores y miembros de la dirección del hospital Santa Maria de Lleida, se han concentrado esta mañana a las puertas del centro para mostrar su repulsa ante la última agresión de un paciente a una doctora y a un vigilante, que se produjo la semana pasada.
Fuentes sindicales han informado de que la protesta, que ha consistido en mantener diez minutos de silencio, ha empezado a las 10.00 horas.
Además de la dirección del hospital, que pertenece a la red de hospitales concertados, ha asistido a la concentración el director de los Servicios Territoriales de Salud en Lleida, Sebastià Barranco.
Tras la concentración, David Ricart, representante de CCOO en el comité de empresa del hospital, ha explicado que tanto los trabajadores como la dirección entienden que esta última agresión no responde al patrón de la mayoría de las anteriores, ya que no estuvo protagonizada por un enfermo mental.
Para el sindicato, aunque el agresor vino buscando su ingreso psiquiátrico, éste no era necesario, a pesar de que en alguna ocasión había sido atendido en dicha área.
Los hechos sucedieron el pasado 21 de enero en el área de urgencias del centro, a la que el agresor llegó a media tarde acompañado de varios familiares.
Tras increpar en varias ocasiones al personal de guardia, el usuario agredió al vigilante de seguridad, al que le rompió dos dedos, y a la doctora de guardia, a la que le estiró del pelo y le provocó la luxación de varias falanges.
El vigilante aún está de baja, mientras que la doctora ya se ha reincorporado a su trabajo tras permanecer tres días de baja.
Por su parte, el agresor consiguió que lo ingresasen en la sala de internamiento del centro y aún permanece en la misma.
Tanto la doctora como el vigilante han interpuesto una denuncia contra el agresor y el centro también ha anunciado su intención de personarse como acusación particular en la causa.
En este sentido, el Fiscal Jefe de Lleida, Juan Boné, ha anunciado que también están estudiando actuar de oficio en el caso, aunque habrá que determinar antes si el agresor sufre o no algún trastorno psicológico.
Los trabajadores han informado hoy de que pedirán a la dirección del centro que refuerce las medidas de seguridad del hospital, ya que aunque todos los sistemas de alarma funcionaron correctamente, no se pudo evitar la agresión.
"Creemos que debería haber un guardia de seguridad más y que el circuito de cámaras que hay en el centro gravase las 24 horas del días las imágenes que ahora sólo visualiza", ha concluido Ricart.
http://ecodiario.eleconomista.es/salud/noticias/1001352/01/09/Los-trabajadores-del-Hospital-Santa-Maria-de-Lleida-protestan-por-las-agresiones.html