La jueza dictó prisión provisional y sin fianza para Adrián C. P. como presunto autor de la muerte del gijonés Miguel Rodríguez
Su novia, que declaró en calidad de testigo, quedó en libertad
El dueño del bar Diamante, Adrián C. P. de 25 años, natural de Riaño (Langreo), pero residente en Pola de Siero, ingresó ayer por la tarde en la cárcel de Villabona como presunto autor de la puñalada que la madrugada del domingo acabó con la vida de Miguel Rodríguez Morán, de 30 años y vecino de Gijón. La víctima estaba casada y tenía un hijo pequeño.
El hostelero declaró ayer durante una hora ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número tres de Pola de Siero. Durante su declaración, Adrián C. P. aseguró que el arma homicida -una navaja de grandes dimensiones que fue localizada el domingo en una alcantarilla cercana a su domicilio- era propiedad de la víctima.
Si bien la Policía Nacional mantiene que la causa de la pelea que se inició en el bar Diamante tuvo como origen «un malentendido» con la novia del hostelero, éste dio ayer una versión distinta a la jueza. Según declaró, el fallecido estaba causando problemas y molestando dentro del establecimiento, por lo que le llamó la atención.
Adrián C. P. explicó que durante el forcejeo a la víctima se le calló de las manos la navaja y fue en ese momento cuando él cogió el arma y se lo clavó en el pecho al fallecido.
Después, y según lo relatado por la Policía, desalojó el local, se fue a su casa, se cambió de ropa y acudió a otro bar de copas de la plaza de Les Campes, en Pola de Siero, en el que finalmente fue detenido.
Miguel Rodríguez Morán quedó tendido en la calle hasta que llegaron las dotaciones policiales y los servicios sanitarios. El joven -que en la actualidad trabajaba como vigilante en las obras del AVE en el concejo de Lena- falleció en el traslado al Hospital Central de Asturias.
La de Adrián C. P. no fue la única declaración que escuchó ayer la jueza que instruye el caso. Antes había declarado la novia del agresor, M. E. S. A., de 29 años y de nacionalidad brasileña, que fue traslada a los juzgados en un coche policial camuflado. La joven, que trabaja como camarera en el bar Diamante, acudió en calidad de testigo y, tras declarar que no tuvo nada que ver con lo sucedido la noche del sábado, quedó en libertad. En un primer momento fue detenida junto a Adrián C. P. al encontrarse de forma irregular en España.
El supuesto homicida acudió a declarar a las 12.50 horas, custodiado por dos agentes de la Policía Nacional. Tras tomarle declaración, la jueza decretó orden de prisión provisional, comunicada y sin fianza para el detenido, que pasó a ocupar los calabozos de la comisaría de Policía Local de Siero hasta que, pasadas las cuatro de la tarde, un furgón de la Guardia Civil le traslado a la cárcel del Villabona.
Antecedentes
Adrián C. P. ya tenía antecedentes policiales por varios delitos de lesiones, malos tratos y robos con violencia e intimidación. El caso se encuentra bajo secreto de sumario según explicó el abogado defensor, Jesús Quesada Canga.
El homicidio se produjo hacia la 1.40 del domingo en el bar El Diamante, situado entre la unión de las calles de Pelayo y la avenida de Gijón, en pleno centro de la capital polesa, donde se produjo una discusión entre el dueño del establecimiento y la víctima.
http://www.elcomerciodigital.com/gijon/20090211/asturias/hostelero-siero-declara-arma-20090211.html