Desde primera hora de la mañana, buzos de la Guardia Civil inspeccionan el cauce del río comprendido entre la pasarela que hay junto al Charco de la Pava y Puerto Gelves, donde se instaló el puesto de mando

La confesión del crimen de la menor Marta del Castillo Casanueva y la ubicación exacta del lugar donde fue arrojado su cuerpo fue el punto de partida de una intensa búsqueda por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Las labores se iniciaron a primera hora de la mañana por parte de los agentes de los Grupos Especiales de Operaciones (Geos) de la Policía Nacional, que se habían desplazado a Sevilla con motivo de las detenciones de Miguel Carcaño y de Samuel Benítez Pérez.

Los agentes iniciaron la búsqueda bajo una pasarela que se ubica en la orilla del Guadalquivir más próxima a Camas, frente al Charco de la Pava. A media mañana, se incorporaron a la búsqueda los buzos especialistas de la Guardia Civil (Geas), así como de la Unidad Militar de Emergencia (UME) y de los Bomberos de Sevilla. También participan en el amplio dispositivo de búsqueda agentes de la Unidad Adscrita de Policía de la Junta, de la Autoridad Portuaria y de Protección Civil.

La espectacularidad del dispositivo, en el que intervinieron además dos helicópteros de la Policía y la Guardia Civil, provocó ayer una gran expectación en el Charco de la Pava, donde un gran número de curiosos que se había aproximado al mercadillo que se instala en la zona, se agolpó en la orilla próxima a Sevilla para presenciar las labores. La Policía procedió a acordonar el lugar, ante la atenta mirada del público que se hallaba junto al río, que fue rastreado desde las ocho de la mañana por una lancha de la Guardia Civil.

Los buzos comenzaron la búsqueda en la zona donde Miguel Carcaño confesó haber arrojado el cuerpo de Marta del Castillo, la noche del 24 de enero, y desde ahí se amplió la búsqueda hasta Puerto Gelves, donde la Guardia Civil, que coordina la operación bajo la dirección del comisario jefe de la Policía Judicial, instaló un puesto de mando avanzado, según informaron fuentes del instituto armado.

Las labores de búsqueda resultaron infructuosas y con la caída de la noche se procedió a la suspensión de los trabajos, que se reanudarán a primera hora de esta mañana.

El tiempo transcurrido desde que el cuerpo fue arrojado al río Guadalquivir, las últimas precipitaciones y las fuertes corrientes que hay en la zona pueden retrasar el hallazgo de los restos de Marta del Castillo.

Esta misma semana, la Policía Nacional había batido las márgenes del Guadalquivir en busca de Marta del Castillo. Los agentes, que emplearon caballos y perros para rastrear las orillas, revisaron además las vías del tren, descampados próximos a la estación de Santa Justa.

En los últimos días, la búsqueda policial se había centrado en la zona comprendida entre San Juan de Aznalfarache, Camas y el Charco de la Pava, lo que indica que los investigadores podían estar ya sobre una pista fiable de que Marta del Castillo podía haber desaparecido en esta zona.

A estas labores, que se intensificaron paradójicamente después de que la familia de la menor criticara que la investigación policial no estaba dando resultados, se incorporaron también voluntarios de la Policía Local, Bomberos y personal del 061, agrupados en la organización SOS Ayuda Sin Fronteras.


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