http://www.hoy.es/20090324/sociedad/menores-blindados-internet-20090324.html
TENEMOS una escuela del siglo XIX, con profesores y padres del siglo XX y alumnos del siglo XXI. Esta sentencia resume con precisión la compleja relación existente entre las nuevas tecnologías, los jóvenes y sus progenitores, y el sistema educativo español.
Durante la última década se ha disparado el número de aulas que cuentan con equipos informáticos conectados a Internet. Los recursos pedagógicos se han multiplicado, al igual que los riesgos a los que se exponen los usuarios de la red global, especialmente peligrosos cuando se trata de menores de edad: un grupo muy vulnerable para los muchos desalmados que ven en sus datos personales un caramelo fácil de arrebatar. Casos de plena actualidad como el de Marta del Castillo sirven de trágico ejemplo de hasta dónde es necesario extremar la vigilancia durante el uso de la Red.
Grandes inconvenientes
¿Es posible garantizar la seguridad del internauta mientras navega? La respuesta es clara, sí. Aunque con matices. De hecho, muchos de nosotros accedemos a diario a nuestra cuenta corriente a través de la web con toda tranquilidad. ¿Y dónde está entonces el problema? Aquí, según los expertos, se plantean dos grandes inconvenientes. El primero, se requiere una buena formación en medios digitales, para conocer los riesgos y ventajas de esta herramienta sin duda imprescindible para los tiempos venideros. El segundo, los avanzados sistemas de seguridad que se requieren son costosos y hasta ahora son coto privado para las grandes compañías que pueden costearlos.
Mientras unos y otros miramos hacia otro lado, los sitios web de anorexia, bulimia o 'ciberbulling' (acoso escolar a través de medios digitales) crecen de forma exponencial, llegándose a presentar en sociedad como simples juegos entre adolescentes que usan un medio nuevo, donde los adultos no tienen sitio y en el que la vigilancia del padre y el profesor brillan por su ausencia.
Seguridad gestionada
La solución de urgencia que se ha dado hasta ahora no ha pasado de condicionar el acceso a los menores a determinadas páginas web, tanto en el aula como en casa, cuando no ha bastado un simple e indolente «no se le pueden poner puertas al campo». Luego, en los cibercafés se hacen competiciones para averiguar quién emplea menos tiempo en desbloquear los filtros parentales.
Muchas son las voces que en los últimos tiempos han venido reclamando los llamados sistemas de seguridad gestionada para el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).
La idea es difundir los conocimientos que permitan una mayor seguridad en la utilización de Internet y de otras tecnologías de la comunicación, educando a los usuarios en general, y en especial a niños, padres, profesores y educadores, luchando contra los contenidos ilícitos y los comportamientos nocivos en línea. En pocas palabras, un sistema de control de acceso parecido al que podemos tener contratado en nuestras casas (Securitas Direct, Prosegur...), acompañado de una plataforma de asesoramiento permanente para padres, hijos y profesores.
Esto es, no basta con limitar el acceso a Internet sin más, sino que hay que dar los porqués para que cada uno comprenda su papel en la cadena de la responsabilidad.
Acuerdo AEPD-Acade
En este sentido hoy está prevista la firma de un convenio entre la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) y la Asociación Española de Centros Autónomos de Enseñanza Privada (Acade) -reúne a 3.457 centros de enseñanza privada, desde la Educación Infantil a la Universidad, que integran a 69.000 docentes y más de 1.000.000 de alumnos-. El acuerdo pasa por la creación de una auténtica conciencia de seguridad en la protección de datos personales. Un pequeño paso para el sistema educativo. Eso sí, un gran paso para la tranquilidad de todos.