http://www.blogsasuna.com/2009/04/02/osasuna-numancia-policia-nacional/comment-page-1/
La historia de Andoni A., un joven pamplonica de 24 años, es muy similar a la de miles de aficionados de Osasuna que se desplazadan a animar a su equipo a domicilio. Con la particularidad de que el 28 de septiembre de 2008 se toparon en su camino unos individuos que le amargaron el viaje a Soria y que le impusieron una multa de 4.000 euros y la prohibición de acceder a un recinto deportivo por seis meses. La razón: haber hecho algo que no hizo. “Decidí acudir a Soria con dos amigos a ver el partido contra el Numancia. Pasamos todo el día en el centro de la ciudad sin incidente alguno; hablando tranquilamente con gente del otro equipo”, detalla Andoni a Blogsasuna.
Más tarde nos dirigimos junto a la ‘txaranga’ al estadio. Antes de llegar a allí, un policía puso alguna pega por mi bandera (la de Irán), pero la cosa quedó ahí. Era el minuto diez de partido cuando se me acercó un hombre vestido de calle y, rodeado de varios policías nacionales, y pidió que le acompañara al pasillo. Pensé que me iban a hacer algún control por si llevaba alguna sustancia estupefaciente o algo parecido, pero al girar la esquina, fuera de la vista de la gente, este hombre me agarró del pelo y me llevo así varios metros mientras que otros policías me daban puñetazos en el estomago.
No eran puñetazos fortísimos, pero me llegan a dar con todas sus fuerzas y me revientan allí mismo. Mientras tanto, me decían que si ahora ya no estaba tan chulito, que si ahora no decía nada y cosas así. Yo estaba flipando. Me pidieron identificación y me registraron. El policía de paisano que se había identificado mientras me agarraba del pelo me dijo que todo aquello me acarrearía graves consecuencias, y se puso a escribir la denuncia.
Me dijo que firmara y naturalmente le dije que no, y me expulsó del estadio negándome la copia de la denuncia. Hablé por teléfono con mis amigos que estaban dentro, pero les dije que siguieran dentro, que yo estaba bien, aunque lo que estaba era bien jodido ante aquella injusticia.
Este joven hincha rojillo explica que “nunca había tenido un incidente similar”. “En varios viajes que he hecho con Osasuna no he tenido ni el más mínimo incidente“, afirma, para denunciar la diferencia en el “trato policial de la Policía Nacional en comparación con el resto de policías de Europa”.
La versión policial, descrita en la denuncia que interpusieron los agentes en el estadio Los Pajaritos, es bien distinta:
“… sobre las 16:45 horas, se deniega el acceso al recinto deportivo a Ud., cuando pretendía acceder por la puerta 3 bis (acceso de la afición visitante) ya que presentaba claros síntomas de embriaguez: -mirada perdida, incoherencia y dificultad al hablar-, no pudiendo mantener el equilibrio. Éste hecho es puesto en conocimiento de los funcionarios policiales, por los vigilantes de seguridad. Posteriormente y a través de las cámaras de la U.C.O., se le localiza en la grada de la afición visitante y cuando se procedía a su identificación, lanza gritos contra los funcionarios policiales, tales como: -SI TIENES UN HIJO SUBNORMAL, HACERLO POLICIA NACIONAL-, a la vez que extendía su dedo corazón con gestos indecorosos. Expulsándole del estadio”.
Andoni niega por completo esta versión de los hechos, y reclama los vídeos de la entrada y del interior del estadio para desbaratar las aseveraciones de la policía. “No hice ni el más mínimo gesto, ni abrí la boca, sólo les acompañé sin poner resistencia alguna. Con los vídeos de las cámaras de seguridad y confiando un poco en la justicia, espero ganar el juicio. Hasta un crío de tres años me daría la razón con esas imágenes”, sostiene.
Además, la propuesta de multa que le impuso la policía y la denuncia interpuesta ante los juzgados presentan varias incoherencias, por un lado se habla de “agresión” a la policía mientras que por el otro se omite esta ‘minucia’, y se afirma que Andoni se había “colado” por otra puerta del estadio diferente a la que entró.
Pero él no fue el único damnificado por la actuación de la policía, ya que un conocido suyo también fue expulsado del campo y sancionado por preguntar las razones de la expulsión de Andoni.
“Le cogió el mismo hombre que a mí me agarró del pelo y le pego un par de patadas no muy fuertes, sin causarle heridas. También le advirtió que todo aquello le acarrearía graves consecuencias y le interpuso una denuncia. Él se fue directamente a la Policía Nacional de Soria para presentar una denuncia contra aquel policía, y resultó ser el jefe de seguridad de espectáculos deportivos de Soria“.
En estos momentos, Andoni , que puede acceder al Reyno de Navarra sin problemas, se encuentra a la espera de la celebración del juicio.