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Desde 2007, Ayuntamiento y Policía negocian un nuevo acuerdo marco, que podría firmarse próximamente. En las últimas semanas, ambas posturas se han radicalizado con la seguridad ciudadana en juego: ningún agente acudió como voluntario a la Media Maratón, por lo que el equipo de Gobierno tuvo que contratar a vigilantes jurados
CRÓNICA LA RODA.- La tensión entre Policía Local y equipo de Gobierno se ha disparado en las últimas semanas. Al malestar creciente de numerosos agentes con las prácticas y el trato de Vicente Aroca –al que acusan de escasa atención política y falta de medios- se suma ahora la ausencia de un Acuerdo Marco entre ambas instituciones, con el anterior caducado desde 2007. “Esta falta de acuerdo está teniendo consecuencias muy serias para la seguridad de los rodenses”, admite una fuente conocedora del trabajo de la Policía. Un ejemplo: el pasado domingo 29 de marzo, a pesar de celebrarse la Media Maratón Villa de La Roda, en la que se dieron cita nada menos que unos 800 atletas, sólo dos policías trabajaron por la seguridad del municipio. Los dos agentes eran los que precisamente estaban de servicio. Este tipo de eventos se cubren con policías de servicio, a los que se suelen unir otros agentes que acuden como voluntarios, eso sí, cobrando horas extraordinarias. Pero para la Maratón, ninguno quiso acudir como rechazo a la oferta económica del equipo de Gobierno.
Según ha podido saber CRÓNICA LA RODA, el Ayuntamiento de La Roda tuvo que contratar a varios vigilantes privados para cubrir este acto. “En el fondo, nos sale más económico que pagar las horas extraordinarias”, ha asegurado a este periódico Constantino Berruga, concejal de Economía. Estas declaraciones han indignado a algunos policías. “El concejal demuestra su escasa voluntad negociadora”, afirman.
El equipo de Gobierno, sin embargo, confía en llegar pronto a un acuerdo. “Las negociaciones están avanzadas. Estamos esperando la contraoferta de los sindicatos policiales para estudiarla”, ha desvelado Berruga. Esa contraoferta se envió el pasado viernes 27 de marzo, después de que la Policía rechazase de pleno lo que ofrecía el Ayuntamiento. “Los salarios apenas se mejoran y no se tiene en cuenta la responsabilidad policial”, afirman fuentes de la Policía. Por ello, salvo excepciones, los agentes se niegan a cubrir ciertos servicios de manera voluntaria.
Actualmente, la negociación del nuevo Acuerdo Marco, que llegará con dos años de retraso, se está centrando en la parte general del acuerdo. Y aún quedaría un anexo específico que puede traer más problemas.
Falta de coordinación entre Policía y Ayuntamiento
A la falta de un acuerdo entre equipo de Gobierno y Policía Local se suma, desde hace tiempo, la inexistencia de una coordinación y organización establecida desde el Consistorio, con el fin de que se reparta la cobertura de los actos extraordinarios que se celebran a lo largo del año entre los agentes que prestan servicio en el municipio. “El hecho de que sean los propios policías quienes decidan si acuden o no a un acto como voluntarios puede provocar que ciertas actividades tengan una amplia cobertura y que otras no cuenten con efectivos, más todavía si le sumamos la falta de acuerdo en las negociaciones que se están dando”, aseguran fuentes conocedoras del conflicto.
La falta de acuerdo que está repercutiendo negativamente en los ciudadanos y en su seguridad. Hechos como el ocurrido el pasado domingo se han repetido ya en alguna ocasión, como en la Romería de llevada del pasado año. Y algo más grave: según ha podido conocer este periódico, podría haberse dado el caso de que, a ciertos actos extraordinarios, no hubiese acudido ningún policía, ni voluntario ni siquiera de servicio. Un hecho que ya ha obligado al Ayuntamiento a contratar seguridad privada, por supuesto, con dinero público. “No creemos que esto sea así. La seguridad nunca ha estado en riesgo”, replica Constantino Berruga.
Sea como fuere, la preocupación de Vicente Aroca con el tema es máxima. La Semana Santa y la Romería están a la vuelta de la esquina. Por el momento, no se sabe qué pasará, ni cómo continuarán las negociaciones, ni cuándo será la próxima reunión, ni si la Semana Santa rodense contará con algún policía que garantice la seguridad. Y qué decir de la Romería de llevada de este año, que coincide además con las Elecciones Europeas. Una fecha conflictiva para la que todavía no se conoce si los rodenses contarán con la seguridad propia de un municipio de más de 16.000 habitantes.
Según fuentes consultadas, la solución podría estar, en primer lugar, en alcanzar un acuerdo económico satisfactorio para ambas partes; y en segundo, en reformar el sistema dotándolo de una organización que, al parecer, ahora brilla por su ausencia.