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Más de un centenar de vigilantes de seguridad secundó hoy la concentración de protesta convocada en los accesos de la terminal del Aeropuerto de Parayas por los sindicatos UGT, USO, CC.OO. y CSI-CSIF por el nuevo convenio colectivo de seguridad privada, cuya negociación se interrumpió el pasado mes de diciembre.
Según precisó el secretario general de la Federación de Servicios (FES) de UGT, Justo San Millán, la movilización, convocada por los sindicatos mencionados en todos los aeropuertos españoles, “pretende forzar a la patronal a reanudar la negociación del nuevo convenio colectivo con la inclusión de mejoras salariales indispensables en un sector con crecientes beneficios empresariales pese a la crisis, aunque con una notable precariedad laboral”.
San Millán aclaró que la concentración convocada hoy en todos los aeropuertos españoles, que sucede a la del pasado 24 de febrero frente a la Delegación del Gobierno en Cantabria, “es sólo el punto inicial de un amplio calendario de movilizaciones que se anunciará de manera progresiva si los empresarios no cambian de actitud, retoman la negociación del nuevo convenio colectivo y abandonan la falta de criterio que ha caracterizado a sus propuestas”.
El sindicalista recordó que “de proseguir la situación actual, los sindicatos recurriremos de inmediato a las huelgas o los paros parciales porque no podemos consentir que los trabajadores sigan sin convenio colectivo por la inflexibilidad de la patronal”
El responsable regional de FES-UGT recordó que “hasta que se interrumpió la negociación del nuevo convenio colectivo el pasado mes de diciembre, los empresarios se han negado de manera sistemática a tratar cualquier cuestión económica con la excusa de la crisis económica, pese a que los beneficios del sector crecen a más de un 5% y el salario medio mensual no llega a los 1.000 euros”.
Justo San Millán rechazó también que los empresarios del sector de la seguridad privada “no sólo no quieren mejorar el convenio colectivo, sino que además pretenden empeorarlo, negociando a título individual con los trabajadores para que renuncien a derechos laborales y sociales ya consolidados y planteando a los sindicatos que se deroguen cláusulas pactadas en su momento”.