Un millar de participantes en la concentración tomaron el 'parking' de San Martín para guarecerse de la lluvia y fueron desalojados por siete patrullas de la Policía Nacional
La Policía Nacional ha identificado a una treintena de jóvenes, algunos de ellos, menores de edad, que profanaron la necrópolis recién descubierta en el entorno de la iglesia de los Remedios durante el macrobotellón de la madrugada del Viernes Santo. Las antiguas tumbas, a las que estos días se han asomado decenas de turistas atraídos por el importante hallazgo arqueológico, están al descubierto y el murete que delimita el perímetro del templo no disuadió a los vándalos, que aprovecharon el desplazamiento del botellón desde San Martín a la Vega por el intenso aguacero para introducirse en el recinto de los Remedios, coger las palas que se están utilizando en los trabajos arqueológicos e incluso orinar en las sepulturas.
Uno por uno, los agentes de la Policía Nacional fueron identificando a los jóvenes que protagonizaron estos actos vandálicos, y se está a la espera de que Patrimonio y el Obispado determinen el alcance de los daños y decidan si presentan una denuncia formal contra los autores, informó ayer la subdelegada del Gobierno, Josefa Chicote. Al parecer, algunos de los identificados procedían de provincias próximas.
Aguacero
El intenso aguacero, coincidieron distintas fuentes de protección ciudadana, «tuvo la culpa del desmadre» del macrobotellón, en principio controlado y reducido al parque de San Martín, aunque siempre hay pequeños focos en otros puntos de la ciudad. En torno a las dos menos cuarto de la madrugada, cuando terminó la procesión del Yacente, relatan algunos testigos, los jóvenes que se reunían en el parque corrieron a refugiarse de la lluvia en el interior del aparcamiento subterráneo. Más de un millar de personas tomaron el 'parking' tras romper las barreras, con la intención de continuar allí la fiesta. El vigilante de la instalación, que es de concesión municipal, alertó a la Policía Municipal. Aunque en principio se presentaron tres patrullas, cuando aparecieron los vehículos de la Policía Nacional se marcharon.
Siete patrullas del CNP con unos 15 policías obligaron a los jóvenes que se resistían a abandonar el recinto, aunque no se produjeron incidentes, relata Josefa Chicote. «No querían salir por la lluvia, pero finalmente se fueron, sin necesidad de emplear la fuerza. No hubo carga policial ni carreras», subrayó.
Los jóvenes se dispersaron pero un importante grupo se dirigió a la zona de la Vega, al otro lado de la carretera, para guarecerse de la lluvia en los soportales de unos edificios de la calle Don Ramiro y también en el recinto del colegio público Claudio Rodríguez, donde trataron de continuar la fiesta. Las llamadas de los vecinos a la Comisaría para quejarse del ruido llevaron a la Policía Nacional a dispersar a estos jóvenes que, aunque molestos, no opusieron resistencia. En torno a las cuatro de la madrugada finalizó el incidente.
Basura
Toneladas de desperdicios llenaban por la mañana la zona de San Martín, que los servicios de limpieza del Ayuntamiento consiguieron retirar en torno al mediodía, indicó el concejal de Protección Ciudadana, Francisco Javier González, quien señalaba que no sólo en esta zona, sino también en alborraz, los Herreros y la Plaza Mayor había gran cantidad de desperdicios.
González insiste en que la competencia de seguridad no es municipal y no contempla habilitar un espacio fuera del casco para que se celebren estas concentraciones con el fin de minimizar los efectos del botellón, como los actos vandálicos en la propiedad pública, las molestias a los vecinos y la suciedad. «Para un evento como éste de Semana Santa no está planteado, porque no funcionaría; en verano y en otras épocas del año está solventado el problema entre ambos cuerpos policiales, pero en estas fechas se ha hecho la experiencia en otras ciudades y no ha funcionado».
Puntualiza el concejal que, de cualquier forma, la competencia en materia de seguridad ciudadana es de la Policía Nacional y no de la Municipal, y considera que «es erróneo vincular la seguridad a la propiedad», aunque el 'parking' de San Martín sea una concesión municipal.
Tráfico
Regular el tráfico y ordenar el discurrir de las procesiones, dijó González, «es el trabajo prioritario en el que se ha empleado a fondo la Policía Municipal, pues tenemos la plantilla que tenemos». En este sentido, se muestra satisfecho de las medidas tomadas, que han consistido, en esencia, en cerrar el casco histórico a los vehículos. No se han producido en estos días, señaló, accidentes de gravedad en el casco urbano y las denuncias han consistido, básicamente, en vehículos que ocupaban aceras o tapaban vados. Se ha reforzado la presencia policial en las procesiones y se ha cortado el tráfico en los accesos al casco «un poco más atrás, con el fin de posibilitar desvíos».
Según el responsable de Protección Ciudadana tampoco ha habido problema con los residentes y propietarios de garajes en calles afectadas por el cierre. «La gente es lógica: cuando ve que está cortado no insiste, y si lo hace es porque vive allí».
http://www.nortecastilla.es/20090412/zamora/treinta-jovenes-profanan-necropolis-20090412.html