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Un mecánico, perteneciente a una de las subcontratas que Renfe tiene para proveer de personal de mantenimiento a Talgo, y no un vigilante, como se publicaba ayer por error en TRIBUNA, es el responsable del robo de combustible detectado en la estación de trenes de Salamanca. Fueron precisamente los vigilantes de seguridad de Adif, en colaboración con el personal de seguridad de Renfe, quienes pillaron ‘in fraganti’ al autor del hurto a finales de la pasada semana, poniéndolo en conocimiento de la Policía Nacional para su intervención y denuncia.
Ana Pedrero
Así, pasada la medianoche del día 17, una pareja de vigilantes de seguridad que prestan sus servicios a Adif y a Renfe Operadora de Salamanca, respectivamente, sorprendió a S. H. S., mecánico subcontratado por Talgo, sustrayendo gasoil de una de las máquinas que arrastra el tren.
Ambos vigilantes ponían así fin a un operativo de varios meses de seguimiento por parte de los equipos de seguridad y vigilancia, para detener al autor de las sustracciones de combustible, a quien podría imputársele un delito de hurto con agravante de abuso de confianza, y poniéndolo a disposición judicial en el momento de su detención.
Tras poner un ‘cebo’, y después de montar un retén de seguimiento durante varios días por parte de los miembros de la seguridad privada, los vigilantes pudieron observar cómo se consumaba el delito por parte del autor, sorprendiéndole en el momento en que procedía a introducir las garrafas en el maletero de su coche y reteniéndolo hasta la llegada de efectivos del Cuerpo Nacional de Policía.
Cien litros de combustible
Personados los agentes, le fueron intervenidas al autor de los hechos cuatro garrafas de gasoil de unos 25 litros de capacidad cada una, así como la manguera con la que perpetraba la sustracción del combustible. Dichas garrafas quedaron depositadas en calidad de prueba judicial por los propios miembros del equipo de seguridad privada, uno de los cuales se desplazó en persona a Comisaría para interponer la correspondiente denuncia.