Los cazadores furtivos eran vecinos de la localidad de Villablino, en la provincia de León, y de la capital leonesa

Un agente del Seprona de la localidad de Villablino (León) junto con ocho vigilantes de tres patrullas de la Fundación Oso Pardo llevaron a cabo el pasado sábado una operación contra el furtivismo en los montes de Somiedo y Orallo, en una zona incluida en el ámbito de aplicación de los Planes de Recuperación del oso pardo en Asturias y Castilla y León y que tuvo como resultado la denuncia de cuatro cazadores ilegales de Villablino y de León capital.

Durante una vigilancia y seguimiento de la población de osos de carácter rutinario, dos vigilantes de la Fundacion Oso Pardo observaron cómo cuatro individuos, uno de ellos con un arma, se adentraban en el Parque Natural de Somiedo, abatiendo a una hembra de rebeco en las inmediaciones del Lago Bueno.

De forma inmediata se dio aviso al Seprona de Villablino y al resto de patrullas de la Fundación que operan en la zona y se montó un dispositivo de vigilancia que concluyó con la interceptación e identificación de los cazadores ilegales, vecinos de la comarca leonesa de Laciana y de León capital.

A los cazadores se les retiró una cabeza de rebeco sin precintar. Posteriormente los guardas del Principado de Asturias y los vigilantes de la Fundación Oso Pardo encontraron los restos del animal decapitado dentro de los límites del Parque Natural de Somiedo.

Cabe señalar que instantes antes de estos hechos, los vigilantes se habían percatado de la presencia de un oso adulto en la misma zona en la que fue abatido el rebeco, un lugar incluido dentro del Parque Natural de Somiedo, en una zona catalogada como de Uso Restringido Especial, y es un hábitat de excelente calidad para el oso pardo, siendo frecuentada por esta especie a lo largo de todo el año.

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