ALMERÍA.- La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSI•F, denuncia la situación insostenible que están padeciendo los agentes de seguridad encargados de vigilancia de El Toyo, una urbanización de dos kilómetros cuadrados que es vigilada en muchas ocasiones por un solo guardia de seguridad, y en el mejor de los casos por dos.
Esta falta de personal, lleva tanto al gerente de la Entidad de Conservación de El Toyo como a la empresa Black Star a presionar a los trabajadores para que cada 10 minutos realicen inspecciones en dos zonas distantes entre sí hasta 10 kilómetros, obligando a los trabajadores a desarrollar sus funciones sintiéndose constantemente estresados y vigilados.
Trabajan de electricista o jardinero
Según denuncia CSI•F, la empresa Black Star y el gerente de El Toyo están presionando a los vigilantes de tal forma que les exigen explicaciones de cualquier desperfecto o pintada que aparece en cualquier rincón de la urbanización, sabiendo que sólo hay un vigilante para toda la extensión.
A menudo se obliga a los vigilantes a realizar funciones de electricista (manipulación de cuadros eléctricos) o de jardineros (manipulando los sistemas de riego).
En este contexto, a juicio del sindicato, no debe extrañar que con una plantilla de seis trabajadores adscritos al servicio de la Entidad de Conservación, tres estén de baja psiquiátrica, uno despedido y otro cambiado de servicio.
En este sentido, CSI•F convocará movilizaciones y denunciará judicialmente la situación exigiendo el cese de esta persecución laboral.
http://www.teleprensa.es/almeria-noticia-179109-CSI95F-denuncia-la-persecuci26oacute3Bn-que-sufren-los-vigilantes-de-seguridad-de-El-Toyo-por-parte-del-gerente-de-la-Entidad-de-Conservaci26oacute3Bn-y-de-Black-Star.html