La llegada de la época estival no solo trae buen tiempo sino que con él
también llegan los miles de turistas que abarrotan nuestras playas y
aumentan considerablemente la población de nuestras poblaciones
costeras.
La Unión de Guardias Civiles de Galicia
(UniónGC) observa desde hace tiempo que en la provincia de Pontevedra
el número de agentes adscritos a la misma es insuficiente: aumenta la
presencia de mafias extranjeras, los alijos de droga, etc. Si a esto
añadimos el aumento poblacional, desde UniónGC aseguramos que no se
puede garantizar un mínimo de seguridad ciudadana en estas
circunstancias.
En la provincia de Pontevedra hay
destinados 1400 guardias civiles. En los meses de verano ese número se
ve reducido al menos en un 35% debido a vacaciones, bajas y otras
causas, por lo que las plantillas se quedan muy mermadas. Sólo las
unidades de tráfico reciben refuerzos de otras provincias. Las unidades
de seguridad ciudadana, punta de lanza contra la delincuencia, siguen
abandonadas.
En Pontevedra, además de los "turistas
normales", tenemos "turistas especiales": personas relevantes de la
política, entre los que podemos citar, entre otros, al señor Pepe
Blanco, al señor Rajoy, al señor Solana etc., que también les gusta
disfrutar de nuestra gastronomía y de nuestras playas. (Nota: Por
medidas de seguridad, sólo se cita a los políticos que públicamente han
reconocido que veranean en Pontevedra) Están acompañados por sus
guardaespaldas. Pero no les llega, su protección es reforzada por
patrullas de la Guardia Civil que vigilan las 24 horas del día sus
residencias veraniegas. Es decir, cada una de estas personas detrae
diariamente tres patrullas de Seguridad Ciudadana. Eso se traduce en un
considerable número de patrullas menos para proteger al resto de la
población y para la lucha contra todas las formas de delincuencia.
Estos hechos son ignorados por la población pero no por los mandos
de la Guardia Civil ni por los políticos que lo ordenan, a sabiendas
del grave perjuicio que se está ocasionando. Estas patrullas de
seguridad ciudadana no pueden cubrir las urgencias del resto de la
población, aunque ocurran a pocos kilómetros, pues la orden es no
abandonar la vivienda de la personalidad asignada. Desde la UniónGC
Entendemos que estas personalidades necesitan un plus de seguridad. Su
vida corre más riesgo que la del resto de los ciudadanos. Pero no es
justo que esta protección se haga en detrimento, como ahora ocurre, y
de manera sangrante, del resto de la población. Es necesario que esa
protección se haga con agentes de fuera de la provincia, destinados
exclusivamente a esa misión. Así no se vería mermada la seguridad del
resto de ciudadanos, contribuyentes que hacen posible ese servicio
policial
Todo esto también conlleva al aumento
incontrolado de los delitos debido, en gran parte, a la falta de
presencia policial en la calle. Como ejemplo, la localidad de Bayona,
turística por excelencia, ha visto aumentado los delitos, con oleadas
de robos en las urbanizaciones y ahora los mandos de la Guardia Civil
se verán obligados a retocar su famosa estadística para que no salten
las alarmas en el Ministerio del Interior. Deben ocultar su mala
gestión. Así, no nos podemos extrañar del desfase entre las
estadísticas policiales, más que engañosas tras su maquillaje, y las
mostradas por el Ministerio Fiscal.
Desde la Unión de
Guardias Civiles de Galicia, UniónGC, consideramos que estos hechos son
muy graves. Queremos dejar claro que, como profesionales que somos, nos
debemos al ciudadano, que quiere una Policía moderna y de calidad. Hoy
estamos en condiciones de afirmar que esto no se está cumpliendo y a
este ritmo no se podrá cumplir mientras no cambien las conductas
denunciadas.
http://www.guardiasciviles.com/ver_noticias.asp?id=7530