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El número 24 en el último año y medio
Un nuevo suicidio en France Télécom paraliza los planes de movilidad interna
Publicado el 29-09-2009 , por I. del Castillo. Madrid
Un empleado de France Télécom de 51 años se suicidó ayer lunes en la región de Alta Saboya, al Oeste de Francia, al saltar desde un viaducto de una autopista. El trabajador, padre de dos hijos, dejó una nota en el automovil que conducía en la que culpaba a las nuevas condiciones y el ambiente del trabajo de su decisión.
El nuevo suicidio supone el vigesimocuarto que se ha producido en la operadora de telecomunicaciones francesa desde febrero de 2008.
Paralización de la movilidad interna
El presidente y consejero delegado de France Télécom, Didier Lombard, que se trasladó ayer por la tarde a la localidad de Alby-sur-Chéran, donde se produjo el suicidio, anunció que la operadora había decidido paralizar, con carácter inmediato, los programas de movilidad interna de los trabajadores que obligaban a un cambio de puesto de trabajo cada tres años.
También anunció la supresión del sistema de baremos por objetivos individuales. Por su parte, el ministro de Trabajo, Xavier Darcos, emplazó a Lombard a "acelerar las negociacions con los sindicatos sobre la prevención de los riesgos psicosociales" en la empresa.
Polémica
La ola de suicidios en la antigua compañia estatal, todavía controlada significativamente por el Estado (que mantiene directa e indirectamente alrededor de un 37% del capital), ha desatado una enorme polémica en Francia, ya que los sindicatos culpan a la dirección de la compañia y a su proceso de reestructuración acometido en los últimos años de la mayoría de estas decisiones que consideran inaceptables.
Durante los últimos años muchos de los trabajadores más antiguos de France Télécom, que tienen aún la categoría de funcionarios, han sufrido especialmente los cambios de puesto de trabajo o de destino provocados por una compañia que se ha volcado en la actividad comercial y los servicios de Internet y el móvil, lo que demanda el mercado, relagando otras actividades tradicionales como la telefonía fija.
Lo que se ha convertido en un escándalo político obligó al Gobierno de Nicolás Sarkozi a intervenir y a principios de este mes, el ministro de Trabajo francés, Xavier Darcos, ordenó al máximo responsable de Seguridad en el Trabajo de su departamento que se entrevistase con los gestores del grupo para evaluar la situación.
La propia France Télécom anunció que reforzaría su plantilla de especialistas en recursos humanos y psicólogos para frenar la ola de suicidios. La empresa ha recortado su plantilla en unos 22.000 trabajadores durante el periodo 2006-2008.