El sector de la seguridad privada es visto como algo necesario por un 77,4% de los aragoneses frente a un 19,8% que considera que su presencia no es útil, según se destaca de un estudio presentado ayer por la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser).

Según destacó el secretario general, Eduardo Cobas, "la seguridad privada solo aparece en los medios de comunicación cuando el sector se excede en su cometido, aunque los ciudadanos ya han normalizado la presencia de vigilantes de seguridad en muchos ámbitos públicos". En su opinión, esta visión positiva de los aragoneses sobre el sector se vio favorecida por la Expo.

Según los datos presentados por las empresas, la principal preferencia de los aragoneses sobre en qué lugares les gustaría que aumentara la presencia de vigilantes fue "en las calles en general", con un 15,7%. En todo caso, es significativa la respuesta obtenida en segundo lugar según la cual los ciudadanos consideran que no debería aumentar la presencia de la seguridad privada. "No podemos olvidar que hay gente que no ve con buenos ojos la privatización de la seguridad", precisó.

Otros de los lugares en los que los ciudadanos reclaman la posible presencia de vigilantes son los colegios, institutos y parques, "lugares donde la sensación de inseguridad parece crecer", apuntó Cobas. En este sentido, el sector cree que es necesario abrir un debate con el objetivo de facilitar la presencia de vigilantes de seguridad como sucede en otros lugares de Europa. "Es necesaria una reflexión para plantearse los porcentajes de coste y efectividad de los servicios públicos", indicó.

Por su parte, el representante de la asociación en la comunidad, Emilio Lorente, destacó que pese a la crisis el sector no ha notado ningún repunte en la contratación debido a la inseguridad y cifró el descenso de facturación en torno a un 4 y un 5%, una bajada similar al resto de los sectores.

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