Condenado un menor internado que quiso golpear a una trabajadora
El chico, de 16 años, tendrá que cumplir una pena de cincuenta horas de prestaciones en beneficio de la comunidad
La titular del Juzgado de Menores número 1 de Santander ha condenado a cincuenta horas de prestaciones en beneficio de la comunidad a un menor de 16 años de edad que intentó golpear a una trabajadora del centro donde estaba internado y a un vigilante que trató de impedírselo, y que en otra ocasión dio una patada a otro empleado de seguridad que le instó a que dejara de insultarle.
La sentencia, que condena al joven por una falta de lesiones, otra de maltrato, y una tercera de coacciones, considera probado que el menor, nacido en Santander, se encontraba ingresado en el Centro de Atención a la Infancia y Familia (CAIF), en la capital cántabra, cuando ocurrieron los hechos por los que ha sido condenado.
La resolución expone que sobre las siete y media de la mañana del 23 de diciembre de 2008, el acusado intentó abandonar el centro y al impedírselo las auxiliares se puso agresivo, golpeando con patadas y puñetazos los cristales y las paredes, y tratando de golpear a una de las trabajadoras.
Entonces intervino un vigilante de seguridad para reducirle, al que el menor lanzó un cabezazo e intentó golpear con una silla, sin conseguirlo, sufriendo el primero una leve lumbalgia en el forcejeo.
Días antes de que ocurrieran estos hechos, el 4 de diciembre de 2008, cuando el joven se encontraba en el mismo centro en compañía de otro menor, comenzaron a insultar a un vigilante, quien les pidió que cesaran en tal actitud, si bien hicieron caso omiso a esos requerimientos, especialmente, el enjuiciado, y continuaron con los improperios. Ante esta actitud, el vigilante se dirigió hacia el encausado, dado que era el que más le estaba insultando, y le pidió que le acompañara al despacho de la educadora, a lo que el menor se negó, por lo que el primero le agarró del brazo para que se levantara del sofá en el que estaba sentado. En ese momento el menor respondió con una patada que alcanzó en la pierna al vigilante e intentó darle un cabezazo y le amenazó con que sus amigos iban a darle una paliza y le matarían, por lo que tuvo que ser reducido. La sentencia destaca que de la evaluación realizada al menor, se desprende una trayectoria marcada por una importante conflictividad en el medio familiar.
http://www.eldiariomontanes.es/v/20100508/cantabria/tribunales/condenado-menor-internado-quiso-20100508.html