Un hombre violó ayer el dispositivo de seguridad de Torre Iberdrola y logró subirse al decimoséptimo piso del rascacielos. El individuo, que se encaramó al techo de Euskadi para reclamar que le dieran trabajo, mantuvo en jaque durante casi tres horas a varias dotaciones de la Ertzaintza, a un grupo de los Bomberos y a los sanitarios de la DYA. Finalmente, bajó al suelo de manera voluntaria. Fuentes de la dirección de obra apuntaron ayer que reforzarán las medidas de vigilancia para evitar que se produzcan nuevos incidentes de estas características.
Natural de Sestao, Eneko ya lo había intentado hace un par de semanas. Entonces fue interceptado por los guardias de seguridad. Ayer, sin embargo, consiguió su objetivo de burlar el dispositivo de seguridad y llamar la atención sobre su situación particular. El intruso accedió al recinto sobre las seis y media de la tarde. Y lo hizo desde las cercanías del puente de Deusto. Saltó una simple valla metálica de unos dos metros de altura y, posteriormente, ya en la base del colosal edificio, superó otra barrera muy parecida.
Los guardias, que probablemente detectaron al joven con alguna de las cámaras de vigilancia, no pudieron darle alcance antes de que accediera a la estructura metálica que permanece anclada al rascacielos y que sirve como salida de emergencia del montacargas principal. Eneko inició entonces una rápida ascensión por una peligrosa escalera metálica.
Subió hasta el piso 17, según relató uno de los muchos curiosos que se arremolinaron en el puente de Deusto para observar el incidente. Durante más de dos horas deambuló de manera errática por el andamio. Subió y bajó. Se paró a fumar un cigarro y habló largo y tendido con los agentes y con los Bomberos que acudieron en su rescate. También lo hizo con una psicóloga. Eneko les explicó que estaba en el paro y que sólo quería un empleo.
Una entrevista para bajar
Pero la tarde se alargaba y el joven de Sestao seguía sin deponer su actitud, aferrado al montacargas del rascacielos, de 165 metros de altura. Finalmente, a las 20.30 horas, habló con un negociador de la Ertzaintza al que puso una sola condición para bajar: ser entrevistado por este diario y su web. Los agentes se retiraron y Eneko volvió a poner los pies en tierra firme.
Fuentes de la dirección de Torre Iberdrola adelantaron ayer que se reforzará el perímetro de seguridad. Se trata del primer incidente grave que sucede durante la fase de construcción del coloso, que arrancó en la primavera de 2007.
http://www.elcorreo.com/vizcaya/v/20101013/vizcaya/hombre-burla-seguridad-torre-20101013.html