UGT, CC.OO. y USO critican la "negativa" de la patronal a negociar "cualquier tema salarial"
Los sindicatos UGT, CC.OO. y USO anunciaron hoy la convocatoria
inmediata de movilizaciones en la seguridad privada por la "negativa"
de la patronal a negociar "cualquier cuestión salarial" en el nuevo
convenio colectivo, que afecta a más de 95.000 vigilantes de seguridad
de toda España, más de 900 de ellos adscritos a las 14 empresas
operativas en Cantabria.
Según precisó hoy el
secretario general de la Federación de Servicios (FES) de UGT en
Cantabria, Justo San Millán, estos tres sindicatos, que cuentan con el
97 por ciento de los representantes sindicales en la mesa de
negociación de la seguridad privada, no pueden aceptar la "actitud
intransigente" de los empresarios en todo lo relativo a las cuestiones
salariales, "y más, cuando una gran mayoría de los vigilantes de
seguridad se ven obligados a prolongar su jornada laboral para disponer
de un salario mínimamente decente".
En nota de
prensa, el responsable regional de FES-UGT recordó que los sindicatos
presentaron en su momento una serie de reivindicaciones en la mesa de
negociación del nuevo convenio colectivo que la patronal se negó a
abordar, emplazando su debate a "nunca antes del año 2009 y hasta que
se conozca una resolución del Tribunal Supremo sobre las horas
extraordinarias".
San Millán aclaró que, ante la
"negativa unilateral" de los empresarios a negociar cualquier cuestión
salarial en el nuevo convenio colectivo y "con el ánimo de desbloquear
la situación", se planteó "una subida salarial mínima para evitar una
mayor pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, que los
empresarios también han rechazado".
"Los sindicatos
sólo propusimos que a partir de enero se produzca un adelanto de la
subida salarial de los trabajadores del IPC real de 2008 más dos
puntos, todo ello a cuenta de lo que se acuerde definitivamente en el
convenio, aunque la respuesta de los empresarios fue que tal pretensión
no está dentro de sus planes por la actual crisis económica", explicó.
Para los sindicatos, "esta posición de enroque de la patronal, que se
niega a abordar cualquier aspecto salarial, vulnera los derechos más
elementales de negociación colectiva" y les "fuerza" a convocar
movilizaciones y "a controlar de manera estricta la legalidad de la
prestación de servicios en el sector".
http://www.cantabriaconfidencial.com/actualidad/2008/noviembre08/24/26.htm