Varios encapuchados robaron hace días en torno a 200 matrículas de coche en la localidad francesa de Pau, ubicada al sur del país, en una acción atribuida a la banda terrorista ETA, según han informado a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista. Dado que los hechos aún están en 'fase de investigación', el Gobierno ha pedido 'prudencia', aunque ha afirmado que la hipótesis que baraja la Policía gala es que se trataría de 'delincuentes comunes'.

Esta acción se produce en el marco del alto el fuego permanente, general y verificable que decretó ETA el pasado 10 de enero. El carácter general de este cese implica, entre otros aspectos, no llevar a cabo acciones de captación de nuevos militantes ni aprovisionamiento de material para perpetrar atentados.

La banda terrorista no ha cesado tampoco el robo de coches en Francia, ya que lo mantiene a un ritmo aproximado de un vehículo al mes. También se han dado casos en los que los terroristas practican más de un robo al mes y después permanecen una temporada sin sustraer más. Según apuntan estas fuentes, este tipo de acciones no se tratan de una actividad regular, ya que la banda las efectúa en función de sus necesidades concretas en cada momento.

En los últimos meses se han denunciado varios robos que, por el 'modus operandi', han sido atribuidos a ETA por las fuerzas de seguridad francesas. Algunos de los coches robados aparecieron abandonados y calcinados tiempo después, una práctica habitual de los terroristas cuando quieren abandonar sin dejar pruebas un vehículo que consideran 'quemado'.

'DELINCUENTES COMUNES'

A pesar de que estas fuentes de la lucha antiterrorista atribuyen el robo de matrículas en Francia a ETA, el Gobierno ha pedido 'prudencia' este lunes y ha recordado que lo sucedido todavía está en 'fase de investigación'. No obstante, ha afirmado que la hipótesis que baraja la Policía francesa es que se trataría de 'delincuentes comunes'.

'No existe ningún elemento en este momento de la investigación para estimar que haya podido ser la banda terrorista ETA', ha declarado a los medios el ministro del Interior, Antonio Camacho, tras inaugurar la nueva Comisaría de Policía Nacional de Paterna (Valencia). Por ello ha afirmado que la hipótesis que baraja la Policía gala es que se trataría de 'delincuentes comunes' y que las fuerzas policiales van a investigar 'a fondo'.


Sobre estos hechos se ha manifestado también este martes el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, que, durante una rueda de prensa en la sede de su departamento, ha subrayado que las Fuerzas de Seguridad francesas están en contacto para analizar estas acciones. 'Mientras tanto creo que es prudente guardar, nunca mejor dicho, prudencia sobre procesos que se están todavía investigando', ha destacado.

Quien también ha hecho un llamamiento a la 'prudencia' ha sido la portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia, ante los 'indicios' procedentes de 'medios franceses' sobre la posibilidad de que se trate de un caso de delincuencia común y no de una acción de ETA, como se había sospechado en un principio.

Por este motivo, la portavoz del Gobierno autonómico ha destacado, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno semanal, la necesidad de esperar a que la Policía gala concluya la investigación en torno a este asunto.

ETA 'ESTÁ A LAS PUERTAS DE UN PASO' HACIA SU DISOLUCIÓN DEFINITIVA

Tras conocer que ETA podría haber sido el autor del robo de las matrículas de coche en Francia, el secretario general del PSOE en el Congreso de los Diputados, Eduardo Madina, ha señalado que 'si es verdad que eso ha sucedido, habrá que investigar en qué consiste y qué volumen tiene'.

Por ello ha afirmado que, robo de matrículas 'aparte', ya que ETA 'está a las puertas de un paso hacia su fase definitiva de disolución', así como 'la sociedad vasca está a las puertas de un paso definitivo hacia una fase de plena libertad y desarrollo ciudadano'.

Sin embargo, la posibilidad de que la banda terrorista estuviera implicada en este robo de matrículas evidencia, para el PP, que mientras ETA no desaparezca 'los terroristas no pueden estar en las instituciones'.

'Los terroristas mientras no se disuelven están en lo que están y esto es la evidencia de que, en tanto en cuanto no se disuelvan, lo que no podemos permitir es que estén donde no deben estar que es en las instituciones', ha resumido la portavoz 'popular' en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, en una rueda de prensa en la Cámara Baja al ser preguntada sobre si se debe exigir a Bildu una condena de este robo y cómo puede influir ese suceso en el futuro político de la coalición abertzale.

De igual modo, el parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, ha opinado que este mismo robo demuestra que ETA sigue 'activa, vigilante, amenazante y a la espera de acontecimientos, condicionando de ese modo la vida política en Euskadi y laminando la libertad y los derechos de los vascos', por lo que ha exigido su desaparición 'definitiva, sin condiciones y para siempre'.

Asimismo, Maneiro ha reprochado a Bildu que no demande a ETA su desaparición y ha señalado que la razón es que 'quiere que siga activa, chantajeando y asustando a los ciudadanos'. En su opinión, el 'único' asunto que debería estar sobre la mesa es 'la desaparición definitiva e incondicional de la banda terrorista'.

OTRAS ACCIONES DESDE EL ALTO EL FUEGO

El robo de estas matrículas no se trataría de la primera acción de este tipo que llevan a cabo los terroristas de ETA. El pasado 20 de diciembre las autoridades francesas atribuyeron a la banda el robo producido en la localidad gala de Valence, donde sustrajeron diverso material para fabricar documentación falsa, que los terroristas emplearían para burlar controles de seguridad y moverse con libertad.

En aquella acción participaron entre tres y cuatro personas. La localidad de Valence está situada a unos 100 kilómetros al sur de Lyon y en concreto el robo se perpetró en la región de Bourg Mdempeage, tres meses después de anunciar ETA el cese de sus acciones armadas ofensivas y unos días antes de decretar su alto el fuego permanente general y verificable.

También el pasado 21 de marzo las fuerzas de seguridad francesas detuvieron a la joven terrorista Jone Lozano, quien portaba un sobre con 54.000 euros en su interior -pese a que en el sobre figuraba escrita a mano la cifra de 48.000- procedente de uno de los últimos cobros antes de que la banda cesase la extorsión a los empresarios vascos.

Según han informado a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista, ETA cuenta en la actualidad con cerca de 60 terroristas en activo en Francia a los que hay que proporcionar infraestructura y la garantía de poder mantenerse en la clandestinidad lejos de la acción de las fuerzas de seguridad.

En cualquier caso, en los últimos meses ETA también ha llevado a cabo movimientos que se salen de esa estrategia de mero mantenimiento, en los que las fuerzas de seguridad enmarcan el robo de matrículas conocido este martes. El pasado 21 de junio fue detenido el terrorista Iñaki Domínguez Atxalandabaso, también en la país galo, procedente de Italia donde había adquirido numeroso material electrónico para fabricar bombas.

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