Un transportista roba casi tres millones y huye con el botín a Barcelona para hacerse la estética
La Policía Nacional recupera 161.000 euros en un hotel barcelonés y en el coche del fugitivo
Estaba acostumbrado al contacto con grandes sumas de dinero. Y. M.,
de 37 años, turco afincado en Alemania, robó de su empresa de
transporte de caudales dos millones setecientos mil euros en metálico.
Se trata de un gran golpe al estilo del Dioni, el vigilante jurado
español que en 1989 se apropió de 298 millones de pesetas de un furgón
blindado de la firma para la que trabajaba. Y. M. no fue a Brasil a
hacerse la cirugía estética como el bizarro vigilante sino a Barcelona,
donde la Policía Nacional ha recuperado una parte del botín: 161.000
euros. La información oficial señala que el fugitivo se arrepintió,
abandonó la capital catalana y regresó a Alemania. Se desconoce qué le
empujó a hacer tal cosa. El regreso del Dioni fue obligado, fue
arrestado y extraditado a España. El retorno de Y. M. parece
voluntario. Ahora está preso.
Según fuentes de la investigación, la Policía Nacional puso en marcha
sus pesquisas cuando detectó que había un extranjero en Barcelona que
se había visitado en un clínica estética para cambiar su aspecto.
Las diferentes indagaciones condujeron a la policía hasta el exclusivo
hotel Miramar de Barcelona. El sospechoso había dejado depositado en el
aparcamiento un Seat Altea por cuya matrícula supieron que existía
sobre él una orden europea de incautación, inspección ocular y
detención de los ocupantes.
La policía dispuso una vigilancia permanente de la habitación que
ocupaba el fugitivo y del coche. Y. M. podía aparecer en cualquier
momento después de ser dado de alta de la clínica. Se informó a la
policía alemana de los descubrimientos hechos en España. Fue mediante
esos mecanismos internacionales como, sorprendentemente, se tuvo
noticia de que el sospechoso había regresado a Alemania para
entregarse. Entonces se procedió a la entrada en la habitación. Dentro
de la caja fuerte se hallaron 27.500 euros en metálico, las llaves del
coche y una llave magnética de una habitación del hotel Majestic de
Barcelona.
El vehículo fue inspeccionado a fondo por la policía hasta localizar,
ocultos bajo las rejillas de los altavoces, 267 billetes de 500. En
total: 133.500 euros en metálico.
Entonces, se siguió la pista del Majestic. Pero resultó ser un callejón
sin salida. Sólo pudo comprobarse que Y. M. había estado alojado allí
del 14 al 18 de noviembre, curiosamente, la fecha de entrada en el
hotel Miramar, donde se halló el dinero.
Según fuentes del caso, la policía alemana continúa con las pesquisas,
pues no se descarta la participación en el audaz robo de alguna otra
persona.
http://www.lavanguardia.es/sucesos/noticias/20081216/53600406938/un-empleado-de-transportes-roba-casi-tres-millones-y-huye-a-barcelona-con-el-botin-para-hacerse-la-e.html