Vigilantes ante la crisisEl sector de la seguridad privada, que en la región cuenta con 76 empresas y factura 175 millones de euros, lleva tres años de recortes por la crisis y el cierre de oficinas bancarias EL SECTOR EN CIFRAS1.494 empresas de seguridad compiten actualmente en el mercado español. La comunidad de Madrid, con 321; Andalucía, con 216, y Cataluña, con 180, son las regiones con el mayor número de estas compañías. Castilla y León ocupa el sexto lugar.
89.500 vigilantes en activo conforman la plantilla global del sector en España.
3.500 millones de euros al año factura el sector. La vigilancia, los sistemas de alarmas y el transporte de fondos constituyen las tres grandes áreas de negocio.
Un vigilante de seguridad, en la estación de Palencia, durante la llegada de un Alvia. :: MERCHE DE LA FUENTE FRANCISCO CORTIJO | VALLADOLID.
La crisis económica no ha dejado ningún sector indemne. Ni tan siquiera aquellos que como el de la seguridad privada llevaban más de 15 años seguidos de crecimiento. Desde finales de 2008, las empresas dedicadas a la vigilancia, transporte de fondos y sistemas de alarmas han visto como su facturación caía más del 10%.
En el mercado español compiten actualmente 1.494 empresas de seguridad, de las que 76 operan en Castilla y León. El sector factura algo más de 3.500 millones de euros y da empleo a cerca de 90.000 vigilantes en activo. Aunque cerca del 75% del negocio proviene de empresas privadas, los recortes en el sector público también han afectado a las empresas de vigilancia.
Además, el fuerte recorte en el número de oficinas de bancos y cajas, que suponen en torno al 16% de la cifra de negocio, también ha sido muy negativa para el sector. Castilla y León es la sexta región de España en número de empresas de seguridad con 76, de las que 12 son de ámbito nacional y 64 de carácter regional. La facturación del sector en la región podría superar los 175 millones de euros al año.
El sector de la seguridad ha sido uno de los que más ha crecido en el mercado español en los últimos años, empujado sobre todo por la apertura de grandes complejos empresariales, numerosas infraestructuras como aeropuertos y estaciones de ferrocarril y también por el 'boom' en la apertura de oficinas de bancos y cajas de ahorros. Antes de la llegada de la crisis el sector había crecido el 28% entre 2004 y 2007. Aunque las tornas han cambiado drásticamente desde finales de 2008, cuando las empresas sufrieron un descenso en la facturación que se mantiene hasta la fecha.
Según Aproser, la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad, que agrupa a las grandes compañías del sector como Loomis, Eulen, Securitas, Segur, Prosegur o Vinsa, «las consecuencias de la crisis económica han afectado severamente al sector de la seguridad desde el tercer trimestre del año 2008». La facturación del año 2009 ya se situaba por debajo incluso de la alcanzada por el sector en el año 2007.
Empresas. Según los datos de la Unidad Central de Seguridad Privada del Ministerio de Interior, en el mercado español compiten actualmente 1.494 empresas de seguridad de diferentes áreas que cuentan en nómina con 89.500 vigilantes activos. Aunque el número de vigilantes habilitados por el Ministerio del Interior en España llega a los 183.800. El sector está muy atomizado ya que cuatro de estas empresas disponen de más de 5.000 empleados cada una en plantilla. En cambio, hay más de 790 empresas con menos de 20 empleados. La Comunidad de Madrid, Andalucía y Cataluña son las regiones que disponen de mayor número de empresas de seguridad que operan en su territorio.
En la región. Mientras, Castilla y León cuenta con 76 empresas, de las que 12 son de ámbito estatal y 64 solo tienen autorización para operar en el territorio de la comunidad autónoma. La región es la sexta de España en número de empresas de seguridad. El 70% de las compañías del sector, tanto a nivel nacional como regional, se dedican a la instalación y mantenimiento de sistemas, mientras que el 26,7% presta servicios de vigilancia física. Por último, el 11,7% de las mismas se centra en centrales de alarma y el 3% en el transporte y depósito de explosivos procedentes de minas y canteras, muy activas en Castilla y León.
Áreas de negocio. El negocio de la seguridad en España se divide en tres grandes áreas. La más importante de ellas por volumen de facturación es la de vigilancia, que supone el 65% de las ventas del sector. La vigilancia ha pasado de facturar en torno a los 1.840 millones de euros en 2004 a más de 2.230 millones en el último año. El segundo negocio en volumen de facturación es el de sistemas y alarmas, que supone más de 980 millones de euros al año. Mientras, la tercera gran área de la seguridad es el transporte de fondos, que mueve más de 300 millones de euros al año. Todos ellos han experimentado una bajada sensible de su cifra de ventas en los últimos tres años, en mayor medida el de sistemas y alarmas y el de transporte de fondos.
Bancos y cajas. La seguridad física sigue siendo el principal argumento del sector. Entre sus mayores clientes destacan sobre todo las infraestructuras de transporte, especialmente los aeropuertos, que concentran el 17% de la cifra de negocio. En segundo lugar se situarían los bancos y cajas con el 16% del negocio, pero con una clara tendencia a la baja ante el cierre masivo de oficinas en los últimos tres años y las que deben producirse tras la integración de las cajas de ahorros. En cuarto lugar se sitúan el comercio, especialmente los centros comerciales, las grandes cadenas de distribución y las franquicias. También destacan las instalaciones energéticas. Y en quinto lugar, con el 14,8% las administraciones públicas, tanto central como regionales y locales, en el control de sus edificios e instalaciones. La vigilancia física en el mercado residencial de urbanizaciones y chalets apenas representa el 2% del mercado global.
Vigilantes. El Ministerio del Interior mantiene en sus registros a 183.838 vigilantes de seguridad habilitados, de los que actualmente estarían en activo 89.500. El número de escoltas privados habilitados supera los 30.500, un número que podría descender en los próximos meses tras el anuncio del cese de la actividad terrorista por parte de ETA. Mientras, los vigilantes de explosivos superan los 17.800, una área de negocio que ha crecido sensiblemente tras el aumento de los requisitos de seguridad exigidos a las empresas del ramo después de lo ocurrido con los atentados del 11-M en Madrid. Por último, entre jefes y directores de seguridad habilitados habría cerca de 10.000 en toda España. Un dato que resaltan desde la patronal de las empresas del sector es que el 83% de los vigilantes cuenta con un contrato de trabajo indefinido.
Fuente:El Norte de Castilla