Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a Ezequiel G. M., de 25 años, como supuesto autor de varios delitos de robo. Este joven, al que le constan 24 detenciones por delitos contra la propiedad, es un delincuente habitual que cambiaba de ciudad cuando cometía diversos delitos para eludir la acción judicial. De hecho, se ha podido comprobar que en siete meses ha actuado en Sanlúcar de Barrameda, Granada, Málaga y La Línea.

La comisaría, que lo definió como un "delincuente itinerante" por este modo de proceder, destacó que además, demuestra tener un "absoluto desprecio" a ser sorprendido y que incluso ha actuado en un colegio de La Línea en horario lectivo.

La detención se produjo el pasado miércoles de madrugada. Una llamada en la sala del 091 procedente del hospital del SAS informó a la comisaría de que habían sorprendido a un hombre manipulando las taquillas de los vestuarios del personal del centro. Dos dotaciones policiales acudieron de inmediato y comprobaron que el vigilante de seguridad de servicio tenía ya retenida a esta persona, que había sido sorprendida forzando las taquillas y los cajones de las consultas externas.

Una vez en la comisaría, la Policía comprobó que el detenido tenía en vigor una orden de búsqueda y captura procedente de la comisaría de Málaga por un delito de robo con fuerza. El grupo GDU de la comisaría se hizo cargo de la investigación y comprobó que se trataba de un delincuente habitual con un modus operandi muy particular.

Ezequiel G.M. fue puesto a disposición de la autoridad judicial acusado de cuatro delitos. Uno es el robo en una vivienda de la calle Jardines el pasado día 6. Según la comisaría, entre las 12.30 y las 14:00 horas se apoderó en esta casa de 17 relojes, una cruz de brillantes, dos ordenadores y 110 euros. También está acusado robar los efectos de varios vehículos en un aparcamiento de la calle Granados en Málaga y de otro robo en un domicilio de la calle Balmes, en La Línea, cometido el pasado día 9, en el que en una hora se apoderó de varias joyas. También se le acusa de un robo en el colegio Blanca de los Ríos cometido el martes, donde, entre las 09:45 y las 10:00 horas, mientras se impartía clase, entró en un aula y se llevó el bolso de una maestra que contenía un teléfono móvil, documentación y 60 euros.

El detenido pasó ayer a disposición de la autoridad judicial y quedó en libertad con cargos.

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