Pues sí. La palabra es increíble.

Supongo que la suerte que tuvo el artificiero, fue que la dirección del cono de la explosión se dirgía hacia la parte trasera del vehículo.

Y que además ese día se había levantado con una flor en salva sea la parte, porque por lo visto afortunadamente no estalló la carga completa
No cabe duda de que volvió a nacer, hay que tener nervios de acero para ese trabajo, aprovecho para añadir la admiración y respeto que me merecen los TEDAX