Llevan tres meses sin tener noticias de su jefe, les han cortado la luz y no tienen nada que vender, pero no se mueven del local
Los nueve trabajadores del hotel-restaurante 'La Nueva Ermita', de Puente San Miguel, permanecen encerrados en las instalaciones al tiempo que denuncian que llevan tres meses «abandonados por todo el mundo». Explican que su jefe, el restaurador torrelaveguense Óscar Cordero, se fue en octubre de vacaciones a México «y no hemos vuelto a saber nada de él». No tienen provisiones, ni dinero para comprarlas, ni material que vender, y les han cortado la luz, por lo que se ven obligados a usar mantas para luchar contra el frío. Además, no tienen un euro que llevarse a casa.
Desde primera hora de la mañana, hasta la noche, ellos cumplen un horario en un hotel-restaurante fantasma. Y lo peor: no ven cómo salir de este entuerto. Estas nueve personas están en una encrucijada ya que la Inspección de Trabajo no puede concederles una baja de oficio como trabajadores (debería hacerlo su patrón), por lo que tienen que continuar acudiendo diariamente a su trabajo «porque si nos vamos tememos perderlo todo», explican, «y para que no nos denuncien por abandono de nuestro puesto de trabajo», precisan.
Así, que entre los nueve se turnan, con el fin de cubrir el horario del restaurante, aunque ya no les queda género en la despensa para poder despachar: «Sólo tenemos cuatro refrescos». El pasado martes les cortaron la luz, por lo que su estancia improductiva en el local se hace todavía más penosa. Desde hace tres días ya ni pueden encender la televisión ni la radio, tienen que abrigarse con mantas, cuando oscurece, se alumbran con velas y, por supuesto, no cobran. Cuando todavía tenían productos para poder vender, se dedicaban a atender, al menos, a los proveedores, que «venían y comían para cobrarse así las deudas».
El pasado día 3 de enero tenían un acto de conciliación pero Cordero no se presentó. Tendrán que esperar a que se celebre el juicio que «con suerte», será en abril. «Mientras tanto, seguimos esperando a que alguien nos dé de baja en este negocio para poder cobrar el desempleo o buscar otro trabajo».
No saben dónde puede estar su jefe, tampoco le localizan en otro restaurante de su propiedad ubicado en Tanos, y es que, aseguran, «acumula una gran deuda por otros negocios». Desde que se fuera a México ni le han visto ni nadie les da referencias de dónde encontrarle y explican que, hasta octubre, habían conseguido cobrar sus salarios, «aunque con continuos retrasos».
Complejo alquilado
La familia Salmón García de los Salmones, propietaria del inmueble, se lo tiene arrendado a este hostelero desde 2010. Ellos también están afectados por esta 'desaparición' del arrendatario que ya les adeuda casi un año de renta, a razón de 2.500 euros al mes. Un portavoz de esta familia explicó que han tenido que llevar el asunto al Juzgado para pedir el desahucio y aseguran que no han vuelto a saber nada más de esta persona «a quien se lo alquilamos porque nos lo recomendaron como buen hostelero ya que había tenido muchos años el Cienvinos».
El complejo se ubica en pleno centro de Puente San Miguel, frente al Ayuntamiento. Ocupa una casona del siglo XIX. Tiene siete habitaciones, tres comedores, dos cocinas y cafetería, además de una amplia terraza.
http://www.eldiariomontanes.es/v/20130111/region/reocin/nueve-trabajadores-abandonados-restaurante-20130111.html
EDITADO (Aqualung)
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