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En otra operación de la Policía, también en Torrelavega, se arrestó a un hombre y una mujer por trapichear con droga
En una triple operación contra el tráfico de drogas realizada en Torrelavega, agentes de la Comisaría de Policía Nacional en Torrelavega han detenido a siete personas, entre ellos un vigilante de seguridad que realiza funciones de escolta en Barcelona y que al parecer traficaba con cocaína. Además, fueron arrestados cuatro jóvenes, uno de ellos menor de edad, que cultivaban marihuana en un trastero, así como un hombre y una mujer por tráfico de droga a pequeña escala.
Al vigilante se le incautaron quince gramos de cocaína en una veintena de bolsitas listas para la venta, una pistola de fogueo, cartuchos con munición y varias catanas, además de un ordenador, tarjetas de crédito y grilletes.
Según una nota de la Policía, los agentes le venían siguiendo desde hace tiempo por sospechar que traficaba con cocaína,preferentemente en un local de la calle Conde Torreanaz, donde trabajaba una amiga. Además, se sabía que alguno de sus clientes tuvo que ser tratado en el hospital Sierrallana después de consumir alguna dosis suya.
Al ser detenido se le ocuparon 23 bolsitas de cocaína y en el registro de su domicilio se le encontró documentación que le implica en el presunto tráfico ilícito y le incautó el coche, un 307 descapotable. El detenido ya estuvo detenido por receptación y asociación ilícita. La brigada sospecha que el arrestado movía una cantidad cercana a los 200 gramos de cocaína al mes, en especial en la zona de La Inmobiliaria.
También pasaron a disposición judicial C. D. J. R., de 31 años, y P. M. de 38, a los que se les incautaron 4 gramos de cocaína, documentación y diversos útiles típicos del tráfico de drogas. La investigación se puso en marcha al conocer la policía que la camarera de un club habría escondido unas bolsas en un canalón de la calle Julián Urbina. La detenida, que carece de antecedentes, reconoció en principio que la droga era suya y para su consumo, aunque luego lo negó. Al llegar a su domicilio para registrarlo se encontraba allí P. M., y que según ella era el que le había vendido la droga, por lo que también fue arrestado.