Las personas prepotentes suelen aparentar ser muy seguras de sí mismas, pero en realidad es mentira, son inseguras, nada sinceras, se creen superiores respecto a los demás y tienen facilidad para darle la vuelta a las situaciones para tener siempre razón. Sin embargo, al mismo tiempo, son capaces de hacer, decir o manipular, con tal de hacerse notar y valer, para que el resto del mundo vea que son mejores que los demás y que tienen razón, aunque muchas veces no la tengan.
Este tipo de personas no saben aceptar un NO por respuesta ante ninguna situación, aunque parezca que la puedan asimilar, realmente casi nunca la aceptan, ni tampoco que el resto de la gente no piense, ni sea como ellos.
Nuestra vida se rige por muchos valores, uno de ellos y de echo muy importante, es el poder de decisión, para elegir nuestras preferencias y elecciones, pero para estas personas este poder de decisión no existe, sólo existen sus propias decisiones e ideales y quieren que el resto de la gente sea igual.
Pero llegará el momento, en el que chocarán con alguien que les plantará cara y les dirá que no van por el buen camino, que se están engañando a sí mismas, que aunque la realidad no les guste no pueden cambiarla basándose en mentiras ni manipulaciones, que todo el mundo no puede ser ni pensar igual, que cada uno puede opinar libremente lo que quiera, sea o no de gusto para el resto de la gente.
Si todos pensáramos igual e hiciéramos lo mismo seríamos clones y considero que en esta vida una gran cualidad, es poder ser uno mismo, aunque eso signifique opinar y ser diferente de los demás, pero eso sí, con una forma de pensar racional, comprensible y sobre todo respetuosa hacia los demas, sin tener que discriminar ni criticar la opinión de otras personas porque no piensen ni crean lo mismo.
"La indiferencia es a la prepotencia como el niño al payaso. El niño se ríe del payaso, porque este lo hace reír"