Santiago Pérez, concejal del PP en Portugalete, al que
custodiaba el escolta implicado en el tiroteo, se mostraba ayer
«asustado» por lo que considera un «acto intolerable», y «sorprendido»
por la actitud de su acompañante. «No me esperaba algo así de él.
Siempre ha sido súper educado, hasta el punto de tener que pedirle que
no me tratara de usted, y ha dado muestras de ser un profesional,
aunque lo de hoy se lo haya cargado todo». El edil no podía remediar un
«pequeño sentimiento de culpabilidad» al ver a una compañera del
vigilante herido llorando y «muy impresionada»
Él mismo se asustó al ver cómo los dos hombres se
apuntaban. «Me han pasado un par de balas por encima. Al segundo
disparo me agaché y me cayeron una sucesión de cuatro casquillos encima
de la cabeza. Uno de ellos lo guardo de recuerdo, aunque se lo he
ofrecido a la Ertzaintza por si fuera necesario como prueba», comentaba
ayer de forma descarnada.
El mismo individuo que se encarga de protegerle le puso
en peligro. El otro escolta «me arrastró hasta el ascensor para sacarme
de allí, dejé la maleta y la bandolera allí», recuerda. Al preguntarle
qué había pasado, le contestó que «son como niños» y que «uno pensaba
que el otro se estaba riendo de él».
Pese a tener sólo 34 años, lleva nueve con escolta. En
este tiempo ha visto «varios amagos» de enfrentamiento entre fuerzas de
seguridad por suspicacias. «Un coche les resulta sospechoso y al final
resulta que está haciendo contravigilancia. Se mosquean, pero nunca
había llegado a dispararse un arma». «Lo triste es que tengamos que
vivir así: con escolta hasta para ir al tren de vacaciones», subrayó
Pérez, quien telefoneará hoy al vigilante para interesarse por su
estado.
http://www.elcorreodigital.com/alava/20080830/pvasco-espana/cayeron-cuatro-casquillos-encima-20080830.html