El coste del equipamiento para defender las embarcaciones en el Índico supera los8.000 euros por persona
La compañía valenciana Levantina sigue a la espera de recibir la autorización de Interior para comprar las armas largas ralladas, el armamento que utilizará la treintena de vigilantes que la empresa ha seleccionado para defender las embarcaciones de los ataques de piratas somalíes. El coste del equipamiento rondará un mínimo de 8.000 euros por persona.
Mientras, el «Alakrana» permanece secuestrado desde el pasado viernes. Y la negociación se prevé larga. Otros atuneros españoles en la zona que faenan bajo pabellón extranjero incorporarán en las próximas semanas seguridad privada. Sin embargo, en aquellos en los que que ondea la bandera española, no están autorizados.
«Sí, parece mentira pero a día de hoy están más protegidos los de bandera extranjera. Ellos recibieron la autorización en verano», lamenta José Luis Roberto, responsable de la empresa valenciana. La compañía sigue a la espera de recibir el «ok» del Ministerio. Pero no pierden la paciencia. «Ya sabíamos que esto iba a tardar. Si no es antes de mitad de noviembre, tendremos que dejarlo para la siguiente temporada».
Los vigilantes, alrededor de una treintena, todavía no han iniciado su formación en un centro especializado de Alicante. «No tiene sentido empezar ahora. Queremos que se preparen con el material que van a utilizar, que cuesta unos 8.000 euros por persona».
El responsable desgrana los gastos. «Las armas realmente no son tan caras como la gente cree. Un rifle Remington, por ejemplo, puede estar en unos 1.200 euros». Las balas, en cambio, sí que suponen una buena cantidad. «Unos tres euros por munición», calcula el responsable. «Y mínimo necesitaremos un millar por hombre», añade. A esto hay que sumar las miras telescópicas - «casi más caras que las propias armas»-, los chalecos (900 euros), los cascos (400 euros) y los guantes, botas y prismáticos, entre otros elementos. La factura final alcanza los 8.000 euros.
Casi tan complicado como obtener la autorización será el traslado de las armas. Una vez se adquieran, estas deberán viajar a Madrid en un vehículo escoltado por la Guardia Civil. Desde la capital de España partirán hacia París. El último destino serán las islas Seychelles. Allí las recogerán los vigilantes. Una treintena de personas, entre 35 y 40 años, la mayoría con experiencia militar y que cobran 5.000 euros al mes
http://www.lasprovincias.es/alicante/20091007/valenciana/empresa-custodiara-atuneros-sigue-20091007.html