Los robos violentos en casas habitadas disparan en Eivissa la contratación de alarmas y de blindajes para habitaciones

J.M.A.

Las circunstancias extraordinarias que ha generado la crisis, sobre todo desde que los bancos cerraron el grifo, han cambiado el mercado de los sistemas de seguridad. Según Juan Carlos Llabrés, manager de comerciales de Trablisa para Balears y península, las pymes, muchas desaparecidas y otras tantas de capa caída, han dejado de contratar sistemas de seguridad, mientras que el mercado de la vivienda privada de lujo está repuntando. Según este experto en medidas de seguridad de una de las empresas más importantes en Balears, «todo el mundo en las islas temía una oleada de robos en cuanto acabara la temporada».

Lo cierto es que, al menos en Eivissa, en los últimos meses se han producido cinco asaltos a casas habitadas. En principio todos tuvieron éxito, pero en dos de los casos la Guardia Civil detuvo a los presuntos autores. En los otros tres, no. Hay que tener en cuenta que las autoridades intentan ocultar estos robos a la opinión pública y sólo informan de ellos si logran detener a los presuntos autores, por lo que es muy posible que los robos violentos en casas habitadas cometidos en Eivissa en los últimos meses sean más.

«Desde la psicosis de la crisis la dinámica del mercado ha cambiado. Las pymes dejaron de contratar y las casas repuntan, las residencias de lujo en las islas (Eivissa incluida) contratan sistemas más sofisticados, como habitaciones acorazadas, pulsadores de pánico, todo como consecuencia de la oleada de robos que se temía tras el verano», señaló Llabrés.

En Eivissa, informó el experto, varios empresarios han contratado con Trablisa blindajes especiales para una habitación en sus lujosas residencias del campo por temor a ser asaltados, una especie de habitación del pánico, y también han aumentado en la isla la instalación de nuevos y más sofisticados sistemas de alarma.

En todas las islas

Tanto en el puente de Reyes como en las fiestas de Navidad se han registrado asaltos en casas habitadas en Eivissa, Menorca y Mallorca, según Llabrés, con todo lo que esto supone de robos de dinero, joyas, vehículos de lujo y, sobre todo, violencia contra las personas.

El último de los asaltos en una casa de lujo en el campo de Eivissa se produjo la pasada noche de Reyes Magos en la residencia de un conocido empresario de la isla. Con él estaba su esposa y su hija, de tan sólo 20 meses de edad. Los ladrones, encapuchados y pistolas en mano, golpearon al empresario y amenazaron con dañar a su familia si no les daba el dinero y los objetos de valor que había en casa, a lo que él accedió.

Uno de los empresarios que sufrió en Eivissa un violento asalto a mano armada en su casa de campo contrató con Trablisa un sistema de blindaje para una habitación, aunque de la instalación se encargó él mismo, informaron desde la empresa. Aunque en este caso de nada le sirvió, este tipo de habitaciones del pánico puede resultar muy útil en caso de asalto, señalaron desde Trablisa. Por otra parte, la Guardia Civil informó ayer de que el todoterreno BMW del empresario asaltado junto a su familia en su casa recientemente y con el que huyeron los encapuchados fue encontrado en las inmediaciones de la residencia. Por el momento no se han anunciado detenciones ni tampoco se ha informado de forma oficial.

En octubre pasado tres hermanos, dos hombres y una mujer, asaltaron la mansión de una pareja de ancianos alemanes en la carretera de Cala Llonga. Los residentes entregaron el dinero, 5.000 euros, joyas y un coche, y no sufrieron daños. La pareja reconoció la voz de uno de los encapuchados, ya que había trabajado para ellos. Los detenidos son Juan G.S., de 56 años, María del Carmen G.S., de 43, y José G.S., de 50. Uno de ellos es el hombre de la foto de esta página.

Aproximadamente un mes antes tres personas encapuchadas asaltaron una casa en la zona Cala Martina, en el municipio de Santa Eulària. Golpearon y ataron a sus dos ocupantes y uno de ellos, una mujer de edad avanzada, sufrió heridas de carácter leve. No se ha detenido a los culpables y las autoridades no han informado acerca de este preocupante suceso. Tampoco se sabe a cuánto ascendió el botín que lograron llevarse los ladrones.

Una gran colección de relojes de lujo fue el botín de dos encapuchados arrancaron el pasado abril a una pareja en su mansión de Punta Prima. Los vendaron, amordazaron y ataron de pies y manos y se largaron de la casa. Él es un conocido empresario de la isla y ella una conocida profesional del sector de la educación. Accedieron a las exigencias de los asaltantes, de quienes no se tiene noticias, y ambos resultaron ilesos. Tampoco se informó de forma oficial.

En junio del año pasado se produjo un asalto en el que se sospecha que participaron cuatro o cinco personas. Ocurrió en la Mola, en Formentera, en Can Francesc d'en Xumeu Petit. Los ladrones entraron cuando no había nadie en casa, pero cuando estaban dentro llegaron primero uno de los hijos y después la madre con otro de los menores. Nadie resultó herido. Los ladrones se llevaron 12.000 euros y la Guardia Civil detuvo a varios sospechosos.

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