IRATXE ASTUI | GERNIKA.

El 'Alakrana' ha sido uno de los buques que ha tenido que cambiar de agentes antes de plazo
El Gobierno vasco no ha desembolsado todavía cantidad alguna -tal y como se comprometió hace tres meses con las empresas atuneras vascas-, por la contratación de seguridad privada para defender los buques del acoso de los piratas en el Océano Índico. «Este tipo de trámites exigen su tiempo y un proceso para recopilar todos la documentación pertinente», justificaron ayer desde el Departamento de Pesca. Como ya adelantó EL CORREO el pasado miércoles, el Ejecutivo de Zapatero tampoco ha pagado un euro todavía.
Ambas administraciones acordaron el pasado mes de noviembre cofinanciar, junto con los armadores, el costo de los escoltas embarcados. Lakua y Madrid afrontarían un 25% del total cada uno, mientras que las empresas pagarían el 50% restante. De hecho, los armadores ya han abonado las primeras facturas por el servicio.
Tres meses después de que el Ministerio de Defensa español permitiera a las compañías embarcar agentes privados, esta experiencia sin precedentes en la flota atunera nacional presenta todavía aspectos a mejorar. «Ha habido problemas con los vigilantes, pero han sido casos contados que, además, ya se han resuelto con otro nuevo proceso de selección de los profesionales. En general, estamos contentos con el servicio que nos prestan», aseguró Julio Morón, director-gerente de la Organización Opagac de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores. Al menos tres buques vascos que faenan en el Índico, -entre ellos el 'Alakrana', que permaneció apresado durante 47 días a manos de una banda de piratas-, se han visto obligados a cambiar sus efectivos de seguridad al poco tiempos de comenzar su primera campaña. «De los cuatro que llevamos a bordo tres han abandonado, antes incluso de que terminaran los cuatro meses de la marea. No se adaptaban a la mar y a estar tanto tiempo fuera de casa. Con los tripulantes se han portado siempre bien, las disputas se daban más entre ellos», manifestaron desde el buque 'Txori Gorri' de Bermeo. Otro de los atuneros que ha tenido que reemplazar parte de sus agentes ha sido el 'Txori Toki'.
Asimismo, algunos vigilantes han denunciado despidos y deficiencias en el equipamiento que les fue asignado, aunque Segur Ibérica, empresa responsable de su selección, asegura que «solo se ha procedido al despido de 6 de las 70 personas contratadas, al no superar el periodo de prueba establecido en sus contratos». Cuatro de los trabajadores solicitaron la baja «por causas personales». Los que no han registrado problema alguno con el personal de seguridad embarcado son los atuneros de empresas vascas que navegan bajo pabellón extranjero y que, por tanto, llevan soldados de fortuna a bordo, en su mayoría ex combatientes británicos. «Estos sí que son profesionales en todos los sentidos», aseguraron desde varias empresas.
Ayer mismo, la Audiencia Nacional aceptó que se personen como acusación particular otros dos marineros del atunero bermeano 'Alakrana' en la causa abierta contra los dos supuestos piratas que participaron en el secuestro -'Abdu Willy' y 'Raageggesey Adji Haman'-. De esta manera, son ya cuatro los tripulantes del buque que han aceptado el ofrecimiento que el juez Santiago Pedraz -instructor de la causa- les hizo el pasado noviembre cuando se desplazó hasta Gernika y Vigo para tomarles declaración.

http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/20100122/pvasco-espana/gobierno-vasco-tampoco-abonado-20100122.html

La frase no tiene desperdicio:
Los que no han registrado problema alguno con el personal de seguridad embarcado son los atuneros de empresas vascas que navegan bajo pabellón extranjero y que, por tanto, llevan soldados de fortuna a bordo, en su mayoría ex combatientes británicos. «Estos sí que son profesionales en todos los sentidos», aseguraron desde varias empresas.