Denunciados 51 mariscadores furtivos e intervenidos 120 kilos de productos

La mayor parte de las intervenciones fueron efectuadas en la zona de la playa de La Caleta y dos días antes de la celebración de la XXII Ostionada y la XXVIII Erizada Popular.

La Guardia Civil del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) ha llevado a cabo un operativo sobre el marisqueo ilegal en el litoral de Cádiz, en el que han sido intervenidos 120 kilos de erizos de mar y ostiones y denunciados 51 mariscadores furtivos.

Según ha informado el instituto armado en nota de prensa, el operativo se ha desarrollado durante los tres últimos días, en los que han sido intervenidos un total de 960 kilos de erizos (Paracentrotus lividus) y 60 kilos de ostiones (Crassostea angulata).

Además, han sido denunciados 51 mariscadores furtivos, cinco ellos lo practicaban mediante inmersión en apnea.

El Seprona identificó un total de 54 mariscadores y únicamente tres de ellos realizaban la actividad con su correspondiente carné de marisqueo expedido por la Junta de Andalucía.

Para la provincia de Cádiz existen 150 autorizaciones.

Además del impacto medioambiental, por la sobreexplotación de zonas ya de por sí muy castigadas por la pesca y el marisqueo furtivo, la destrucción de arrecifes para la extracción del ostión y la captura de ejemplares con talla inferior a la reglamentaria (inmaduros), el marisqueo furtivo pone en serio riesgo la salud de las personas, según la nota.

La Guardia Civil recuerda que contienen toxinas y agentes microbianos que pueden causar enfermedades tales como la hepatitis o la salmonelosis, dado que el marisco que capturan no pasa por los centros de depuración.

La mayor parte de las intervenciones fueron efectuadas en la zona de la playa de La Caleta, en las inmediaciones del castillo de San Sebastián, en Cádiz, dónde es "habitual" esta actividad ilícita.

Los ejemplares intervenidos fueron devueltos aún con vida a su hábitat natural, en presencia de los infractores, a los cuales se les retiraron los artilugios empleados, principalmente ganchos de acero denominados "garabatos".

Todos ellos fueron denunciados con sanciones que pueden alcanzar los 3.000 euros.

Esta actuación se produce dos días antes de que en Cádiz comiencen las fiestas gastronómicas previas al Carnaval, ya que el próximo domingo se celebrarán la XXII Ostionada y la XXVIII Erizada Popular.


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