Asesinan a 4 vigilantes tras robo de café


El crimen ocurrió entre el jueves en la noche y ayer en la madrugada. De las bodegas fueron robados 351 sacos de café, parte de este, listo para exportarse. La PNC no descartó ninguna hipótesis, incluso que los autores podrían haber obtenido información dentro del beneficio.


Escrito por Suchit Chávez/Keny López/Joyce Álvarez
Sábado, 26 febrero 2011 00:00




Las huellas, las declaraciones y las pesquisas iniciales de la PNC en el beneficio Belén del cantón Flor Amarilla, en Ciudad Arce (La Libertad), dieron cierta luz para esclarecer cómo fueron asesinados cuatro vigilantes del lugar, pero no alcanzaron para dilucidar qué sucedió con los 351 sacos de café que se robaron de las bodegas, además de las armas del personal.



El crimen habría ocurrido entre las 11:30 de la noche el jueves y las cero horas ayer, determinaron las autoridades por el tiempo de fallecidos que las víctimas presentaban.



Los datos recabados apuntan a que a esa hora los vigilantes José Antonio Pineda, José Aníbal López, Simeón Cañas Joachín y Salvador Pineda se encontraban juntos en un local del beneficio de café. Uno de ellos, se baraja, podría estar preparándose para dormir, o haberlo estado ya, porque se encontraba sin camisa.



Los ladrones, entre seis y 10 personas, llegaron y escalaron el muro externo. Sorprendieron a los vigilantes, los desarmaron y los sometieron. Luego, rompieron el candado del portón y el furgón de varias toneladas ingresó de retroceso hasta la puerta de la bodega. Desde ese momento, el tiempo que corrió para cometer el cuádruple asesinato no alcanzó siquiera la hora de duración, según estimaciones policiales.



Entre 10 y 15 minutos invirtieron para cargar 351 sacos de café al camión, 122 de estos identificados por personal del beneficio Belén como café de exportación, con viñeta que indicaba que estaba listo para exportarse los próximos días hacia Nueva York, Estados Unidos, y de $270 el quintal.

Los 122 sacos constituían 183 quintales, según cálculos de investigadores. El resto: café pergamino, al que aún le faltaba procesarse. El total de lo robado, de acuerdo con datos obtenidos por la PNC, asciende a $85,807.50.



Después de ello, los asaltantes obligaron, usando armas de fuego, a los vigilantes a internarse 200 metros desde la bodega hacia una plantación de limones. Los golpes en la espalda de uno de ellos dan cuenta de que la boquilla de una escopeta 12 fue golpeteada en ese lugar con fuerza suficiente como para dejar rastro. Durante el camino, los asaltantes dispararon entre cuatro y veces, según el jefe de la División Antihomicidios (DIHO) de la PNC, Marco Tulio Lima, “para amedrentarlos”.



Posteriormente, los vigilantes –cuyas edades oscilaban entre los 37 y 70 años– fueron asesinados a pocos metros de distancia uno de otro. Dos de ellos eran hermanos. Lima no descartó que para el crimen fueran utilizadas las mismas armas de los vigilantes: dos escopetas calibre 12, una pistola calibre 9 milímetros y un revólver calibre 38.



Parientes de las víctimas detallaron que solo entre dos de los vigilantes quedan nueve hijos en la orfandad. Todos, además, eran cooperativistas de El Espino. Los cadáveres fueron encontrados por los vigilantes de relevo, ayer entre las 5 y las 6 de la mañana. Algunos tenían solo tres meses de trabajar en la cooperativa.



Las pesquisas recabadas por la PNC dan cuenta de las huellas del furgón de cuatro ruedas encontradas a la puerta de la bodega, huellas en los muros externos, el candado roto y los casquillos rumbo adonde fueron asesinadas las víctimas. Pero del destino del café, ayer hasta el mediodía, no se tenía nada en claro.



El inspector Lima dijo que no se descartaba que alguien del interior del beneficio hubiese filtrado información acerca de la presencia del café, directa o indirectamente.



El jefe policial aseguró que desde ayer se lanzó un operativo que buscaba la intervención a bodegas y beneficios en que, se tiene información, compran café robado. Estos serían tres lugares: uno ubicado en Santa Tecla, otro en el occidente del país y el tercero en San Juan Opico.

Condenan crimen
“Un hecho como este se condena, porque no solo fue robo, se le quitó la vida a cuatro personas y eso va más allá del crimen común”, manifestó el presidente de PROCAFE, Antonio Arévalo.

Los datos de la institución arrojan que en la cosecha 2010/2011 (de octubre de 2010 a septiembre de 2011) se han reportado 14 denuncias de robo, 25 detenciones y 5,514 quintales de café decomisados.



Por su parte, el ministro de Justicia y Seguridad, Manuel Melgar, lamentó los asesinatos. Sin embargo, indicó que el hecho y la desaparición de armas evidencian la necesidad de trabajar con las empresas de seguridad, “no solo se trata de tomar un arma y ponerse que ya es vigilante”, dijo.



Lima detalló que el plan de seguridad en estos casos funciona únicamente en tiempo de cosecha. “Luego, se quedan monitoreando las procesadoras, aquí monitoreaba la Policía Rural”, dijo.