La plaga de robos en comercios y grandes superficies comerciales, avivada por la crisis económica, no cesa. Trabajadores de la empresa Primark retuvieron días atrás a dos jóvenes a las que pillaron robando prendas de ropa. Dieron aviso al 091 cuyos agentes de la brigada de seguridad ciudadana las identificaron como T.A.C., de 20 años de edad, y E.A.M., de 27. Ambas mujeres contaban con antecedentes desfavorables.

La Policía ha instruido ya las diligencias por una falta de hurto (el valor de lo sustraído no supera los 400 euros) quedando ambas jóvenes emplazadas para la realización de un juicio rápido. Como ya ha venido informando este diario, son decenas los casos de hurto (de mayor o menor cuantía) los que la Policía ha ido esclareciendo este verano gracias a la colaboración que les presta los vigilantes y trabajadores.

También efectivos del mismo cuerpo policial detuvieron al varón D.G.R., por su presunta implicación en un altercado que se produjo en la céntrica calle Higueras a plena luz del día. El hombre quedó ingresado en los calabozos en espera de ser puesto a disposición de la autoridad judicial competente. Otro hombre manifestó que acudiría a la comisaría para denunciar al otro, según ha podido conocer este medio.

http://www.diariodejerez.es/article/jerez/1037814/retienen/dos/jovenes/las/pillaron/robando/una/tienda.html

Citación :

Trabajadores de la empresa Primark retuvieron días atrás a dos jóvenes a las que pillaron robando prendas de ropa.

Con la crisis me temo que cada vez mas estas empresas van a prescindir de una seguridad privada tan limitada legalmente en sus funciones que no resulta rentable, actualmente se puede sustituir impunemente por la de un dependiente cualquiera. Asi están las cosas por mucho que nos pesen.

Luego pasa, lo que pasa. Una cajera que intenta para a un chorizo, el chorizo se revuelve y la empuja o agrede. ¿Y luego que?...

http://www.adn.es/local/zaragoza/20110519/NWS-1569-Hombre-sorprendieron-comercio-robando-cajeras.html

Independientemente de lo que pase cuando cojan al ladrón, la cajera se queda con los golpes y el trauma por hacer algo por lo que nadie le paga y menos aún le agradece.

El que quiera Seguridad Privada, tiene que pagarla. Y si considera que no le compensa, lo que no puede hacer es dar órdenes a sus empleados para que dejando de lado, aquello por lo que están cobrando realmente, estén pendientes también de los robos que haya.