Aumentan las capturas ilegales de marisco en todas las rías
Imagen tomada por la cofradía coruñesa de furtivos en O Burgo.
- Citación :
- * En lo que va de año se ha decomisado el doble de kilos que en 2010
* Las mareas y el verano incrementan el furtivismo
* Las cofradías se quejan de la falta de medios de la Xunta
* Mar asegura que ha aumentado el personal para la vigilancia
Los mariscadores gallegos están desesperados. En los meses de verano están asistiendo a un repunte del furtivismo "inédito" en los últimos años. El buen tiempo y las mareas de verano siempre ayudaron a los ilegales, pero el sector está convencido de que la crisis económica y la facilidad para vender el producto robado están detrás del incremento de las capturas ilegales.
Y es que desde enero hasta finales de julio, el Servicio de Guardacostas de Galicia requisó un total de 58.565 kilos de diferentes especies entre las que se encuentran, en su mayoría, almeja babosa y japonesa, pulpo, centollo, nécora y merluza, frente a los 27.024 kilos requisados en los primeros meses del año anterior. Unas cifras que representan casi el doble de lo requisado el pasado año y que coinciden con las denuncias realizadas por las cofradías de toda Galicia.
"Hacía mucho tiempo que no veía una cosa como ésta", asegura Virginia Souto, patrona mayor de la cofradía de Barallobre, en Ferrol, que recuerda que el último gran repunte del furtivismo tuvo lugar "hace siete u ocho años, pero no fue de esta magnitud". Precisamente en esta ría fue el escenario, el pasado miércoles, del último gran operativo contra 60 ilegales a los que decomisaron 184 kilos de almeja e incautaron 26 útiles.
Falta de legislación
Las razones son diversas, pero todos coinciden en que la crisis y la falta de una legislación más dura contra los ilegales y sus compradores facilita este tipo de prácticas. "El problema es que los cogen y los sueltan porque dicen que son insolventes", critica Santiago Cruz, patrón mayor de la Cofradía de San Bartolomé, en Noia. Por eso, el sector pide más "mano dura" tanto para los ilegales reincidentes como para aquellos restaurantes que les compran el producto.
Además, alertan de los problemas de salud que puede acarrerar el consumo de estos bibalvos, muchos de ellos recogidos en zonas C, por lo que es necesario una depuración posterior. El Servicio de Guardacostas, dependiente de la Consellería del Mar, en colaboración con los agentes de la Policía Autonómica, realizaron en lo que va de año, un total de 9.480 inspecciones, de las cuales 2.264 fueron realizadas en establecimientos, restaurantes y supermercados. Esto dio como resultado un incremento en el número de decomisos de más del 115% respeto del incluso período del año pasado.
Sólo en la última semana, la Xunta en colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado realizó varios operativos en las rías de A Coruña y Ferrol y expulsaron a 475 mariscadores ilegales y aprehendieron 271 kilos de almeja, berberecho y vieira, además de 55 útiles. Desde enero de este año se llevan desarrollados 70 operativos especiales en conjunto con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, 24 más que el año pasado.
Quejas generalizadas
Unas operaciones que, sin embargo, no amedrentan a los furtivos. "Esta mañana -por el viernes- he visto cómo había casi 50 furtivos en una playa de Ferrol", se queja Virginia Souto. Unas denuncias que también realiza Santiago Cruz que ha observado cómo, en los últimos meses, han aumentado "de forma indiscriminada" las capturas ilegales. También la agrupación de mariscadores de a pie de O Burgo denuncia que en esta ría se esquilman diariamente 600 kilos de marisco.
De hecho, los mariscadores de la comarca de O Barbanza han sufrido ya amenazas, chantajes y casi agresiones físicas. Por eso, algunas cofradías han redoblado la vigilancia y, a pesar de todo, los ladrones de marisco siguen campando a sus anchas. "Hemos tenido que contratar a tres vigilantes nuevos y por la noche son seis, entre vigilantes y personal de la cofradía, los que patrullan las aguas para evitar saqueos", asegura.
Una situación que se repite en otras zonas, como Celeiro, Vilaxoán ou Ribeira. Por eso, las cofradías reclaman "más mano dura" por parte de la Xunta y, especialmente, que incrementen los efectivos de vigilancia. "Tendrían que tener una lancha en cada ría", asegura Santiago Cruz que elogia, sin embargo, el trabajo de la Guardia Civil. "Si no es por ellos, tendríamos más problemas porque, a veces, te encuentras con siete u ocho furtivos y se ponen gallitos", asegura.
Compromiso de la Xunta
En cambio, desde la Consellería do Mar destacan su compromiso con la persecución del furtivismo. Fuentes de este departamento consultadas por ELMUNDO.ES destacan que en los meses de verano se han incrementado las inspecciones y los servicios de vigilancia.
De hecho, insisten en que la Xunta mantiene la línea desarrollada desde que se había puesto en marcha el Plan de Lucha contra el Furtivismo en julio de 2009 para mejorar la coordinación entre Guardacostas de Galicia, Guardapescas de las Cofradías, Policía Autonómica y Guardia Civil.
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/09/02/galicia/1314975738.html