El secretario general de seguridad privada del sindicato USO Canarias comenta las informaciones aparecidas en Canarias Investiga.

Juan Díaz es uno de los sindicalistas que lleva más tiempo denunciando las irregularidades del sector de la seguridad privada en Canarias. A lo largo de tres reportajes, Canarias Investiga ha puesto de manifiesto algunos de los hechos más preocupantes en este ámbito, y las informaciones aportadas por FTSP-USO han sido de gran valor para dar un poco de luz.

Díaz considera que la unidad y la sindicalización son dos pasos fundamentales para empezar a cambiar las condiciones de trabajo de los vigilantes. Reclama también una puesta en común de las partes implicadas como primer paso para empezar a poner orden en este complicado sector.

Pregunta. ¿Cómo valora USO las informaciones de esta semana sobre la seguridad privada en Canarias?

Respuesta. De manera muy positiva, ya que hay que hacer público y de manera veraz lo que está sucediendo en nuestro sector en Canarias, algo que llevamos denunciando desde hace muchos años.

P. ¿Cómo hemos llegado a esta situación de casi impunidad de algunas empresas?

R. Debido en gran parte a un nefasto control y gestión de la Administración Pública, ya que es la responsable de otorgar los contratos públicos de seguridad a empresas que cumplan con la legislación vigente. Pero aquí en Canarias ocurre todo lo contrario, se adjudican estos servicios en su gran mayoría a empresas que se caracterizan por su precariedad laboral y un total desprecio hacia los derechos de los trabajadores y trabajadoras de este sector. Si además añadimos el escaso interés de la clase política por la problemática de este colectivo, se crea una combinación perfecta para que algunos empresarios campen a sus anchas creyéndose los amos de este sector. Empresas como Seguridad Integral Canaria y Esabe, que son las principales protagonistas de los artículos publicados esta semana, lideran el ranking de incumplimientos.

P.¿Cuáles son los principales problemas del sector?

R. Los problemas históricos en esta profesión son el intrusismo, los incumplimientos de convenio colectivo, la competencia desleal y ahora se unen las adjudicaciones de los concursos públicos de seguridad privada. Se han convertido en auténticas subastas donde se otorgan al mejor postor, por lo que deriva en una situación de indefensión hacia los trabajadores ya que al tenerse solo en cuenta la oferta más barata (alguna con riesgo), trae aparejado incumplimientos de todo tipo por parte de las adjudicatarias, y una explotación contra los trabajadores con jornadas laborales sin fin. Todo eso se suma a la situación económica y laboral que estamos viviendo, de la cual se aprovechan estas empresas con el beneplácito de la Administración.

P. ¿En qué situación está el sector?

R. Realmente la situación está muy tensa, ya que cada vez estas empresas actúan de manera más salvaje hacia sus plantillas con recortes de derechos por la vía de los hechos consumados, es decir, por la cara. Esto los convierte en simples maquinas de facturar sin tenerse en cuenta los mínimos derechos fundamentales. Por eso el sector está muy judicializado, con demandas de derechos y de cantidades. Como ejemplo, un fallo de un Juzgado de lo Social de Las Palmas dice: "El despido debe ser considerado radicalmente nulo, y ordena a Seguridad Integral Canaria a cesar en su conducta anticonstitucional". Sobre esta empresa y Esabe ha habido muchas actuaciones por parte de la Inspección de Trabajo debido a infracotizaciones en los pagos a la Seguridad Social. ¿Cómo es posible que la Administración otorgue servicios a empresas que incumplen con la propia Administración?

P. ¿Qué trabajo han estado haciendo ustedes en este ámbito?

R. La Federación de Trabajadores Seguridad Privada de USO Canarias viene realizando un trabajo de concienciación de la problemática de este colectivo hacia todas las partes, con diversas reuniones a nivel político, empresarial, usuarios y con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, además de la acción sindical del día a día en que nos vemos inmersos. Esta Federación ha volcado todo su esfuerzo provocando las acciones necesarias, llámese denuncias ante la autoridad laboral, juzgados, o como en este caso hacia la opinión pública, para que se sepa qué sucede con la seguridad privada en Canarias y en nuestro país.

P. ¿Cuales van a ser las acciones de USO en el futuro?

R. Vista la situación, radicalizar las movilizaciones de esta Federación dentro del marco de la unidad sindical hasta lograr la dignificación de la seguridad privada en Canarias. Es muy necesario que se conozca toda la problemática para buscar las soluciones oportunas entre todas las partes implicadas. No es de recibo que las empresas incumplidoras queden impunes de las tropelías que han venido y vienen materializando a costa de los trabajadores.

P. ¿Cree que sus propuestas tendrán acogida?

R. No es una decisión unilateral, es una cuestión de las partes implicadas, y si se quiere la paz social se necesita aunar esfuerzos. Es un trabajo arduo y lento, pero nuestras propuestas y reivindicaciones no caerán en saco roto. La clase política y las empresas incumplidoras, que ya bastante mala imagen se tiene de ellas, deben tenerlas en cuenta. El objetivo que nos hemos marcado es lograr un resultado positivo a medio plazo. Nuestro trabajo y credibilidad viene reflejado en los resultados de las elecciones a Representantes de los Trabajadores, donde la Federación de Trabajadores de Seguridad Privada de USO Canarias es la primera fuerza sindical del sector en Canarias.

P. ¿Qué mensaje quieren lanzar?

R. Unidad y sindicalización. En un sector tan conflictivo los trabajadores deben tener conciencia de que la única herramienta de la que disponemos es estar organizados, si bien es cierto que actualmente el modelo sindical imperante está en vías de extinción. Ejemplo de ello que hasta hace un año se estimaba que la afiliación a organizaciones sindicales en España estaba entre un 11% o 12% y según los últimos datos roza el 8% aproximadamente. Es un dato contundente que demuestra que se ha perdido confianza en el sindicalismo al que estaba acostumbrado la clase trabajadora y que cada vez más hay un acercamiento de los trabajadores al sindicalismo independiente, como ejemplo, en nuestra organización estamos teniendo un crecimiento imparable tanto a nivel afiliativo como representativo. Pero lo más importante es esa unidad de la que hablo a través de la lucha y la reivindicación, y en el caso que nos compete, acabar con esas empresas de seguridad que son la vergüenza de nuestra profesión.

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