Defensa cifra en 75 millones el coste de la misión para proteger a los atuneros.
Los armadores españoles advirtieron ayer de un nuevo e «inminente» repunte de la piratería en las aguas internacionales frente a las costas somalíes «en cuanto acabe el monzón» (una época del año con intensas lluvias), y reiteraron el mensaje de «que no se darán cuenta (en alusión al Gobierno) que tienen que corregir la situación antes de que acabe ocurriendo una desgracia, como la muerte de alguien». Los empresarios no aceptan en principio el plan ofrecido por el Gobierno para embarcar seguridad privada en sus buques, aunque sea con armas de largo alcance, tal y como ofreció el Ejecutivo, «porque no deja de ser un parche; de modo que seguiremos insistiendo ante las autoridades que esto se arreglaría con la incorporación de la infantería de marina a bordo, como han hecho los franceses».
A este respecto, los armadores, que hicieron estas declaraciones en la jornada inaugural de la Feria Mundial de la Pesca, que se celebra en Vigo desde ayer y hasta el próximo sábado, añadieron que están dispuestos a pagar parte del coste de la seguridad que podría proporcionar la Armada española; es decir, no los sueldos de los militares, sino las dietas a mayores en concepto de peligrosidad, además de los gastos que supondría el embarque de las tropas a bordo. Este embarque podría producirse, llegado el caso, en el archipiélago de las Seychelles. Los armadores recelan de la seguridad privada «porque se precisa personal profesional y bien preparado para estas situaciones, que son similares a operaciones de guerra».
Por su parte, la ministra de Defensa, Carme Chacón, instó ayer a la flota a contratar seguridad privada y descartó embarcar a militares en los atuneros, puesto que «dar seguridad a empresas privadas que hacen negocio privado» ya cuesta 75 millones de euros al año.
http://www.lavozdegalicia.es/galicia/2009/09/17/0003_7976482.htm